El grupo de Los Manolos y Las Manolas de Gójar también presentarán la obra en Dílar y en la Virgen de las Angustias

Arranca en la Iglesia de San Matías las representaciones de 'La pasión de Jesús y el mensaje de María'

Ciudadanía - IndeGranada - Viernes, 17 de Marzo de 2017
Este sábado comienzan las representaciones en Granada de la obra de teatro ‘La pasión de Jesús y el mensaje de María’, a cargo del grupo Manolos y Manolas de Gójar, dirigido por Javier Quiles.
Un momento de la representación de la obra.
grupo Manolos y Manolas de Gójar
Un momento de la representación de la obra.
La representación de la tarde este sábado será en la iglesia de San Matías. La misma obra se representará el día 25 de marzo en la Iglesia Parroquial de la Inmaculada Concepción de Dílar y el día 2 de abril en la Basílica de la Virgen de las Angustias. 
 
La  obra de teatro  es un relato de algunos hechos de la vida de Jesús  y “se debe considerar no solo como una expresión artística sino como la expresión de un sentimiento, de un lamento o de una oración de gentes sencillas que acuden a Jesús de Nazaret para ahogar sus penas y, sobre todo, está dedicada  especialmente a las personas que sufren, como sufrieron  Jesús  y María, que lloran y que padecen  cada día su propia pasión”, señala Javier Quiles.
 
Comienza la obra describiendo la tremenda corrupción y degeneración en Roma, la ciudad de los amos del mundo. Por ejemplo, César Augusto presentó 320 pares de esclavos que  mutuamente se tenían que matar y el emperador Trajano organizó unos juegos que duraron ciento veintitrés días  y en los que combatieron 10.000 gladiadores. Después de esto el filósofo Seneca  dejo escrita esta acusación: “Después de que he estado entre los hombres vuelvo menos hombre”. 
 
La obra también  habla de ese loco ambicioso que es Judas y del asombro de Pilatos cuando le dice a su propia esposa Prócula en un precioso dialogo: “Pero después de curar y dar de comer a la gente lo quieren matar.”
 
Al final la Virgen,  acompañada de las santas mujeres,  llora  el dolor, la tragedia,  la incomprensión y la injusticia que se cometió  con su hijo.  “A pesar de su tremendo dolor manda un mensaje de aliento y de esperanza antes de subir al cielo para todos y especialmente para los que lloran, los que sufren y los que padecen porque ella pedirá a Jesús  cada día por todos nosotros”, dice Quiles.