La Fundación Purísima Concepción de Hermanas Hospitalarias en Granada obtuvo del Comité de Certificación de la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía la certificación en el nivel avanzado en enero de 2018. El pasado 24 de julio recibía la visita de seguimiento para comprobar que se mantiene el nivel de certificación avanzada con el que cuentan los distintos dispositivos residenciales y diurnos de la fundación, en concreto: la Residencia para Adultos, la Residencia para Menores, la Residencia para Psicodeficientes, los Servicios de Día I y II, los Centros Ocupacionales I-II y la Vivienda Tutelada “Mª Josefa Recio”. 

El centro ha aportado la información requerida para la evaluación de seguimiento a los dos años y medio. Un certificado que evalúa tanto las instalaciones de las unidades descritas, como la profesionalidad y competencias del personal y los procesos fundamentales para la prestación eficaz del servicio, además de la canalización de sus recursos de forma adecuada y que la agencia tras su evaluación ha resuelto mantener la certificación en el nivel avanzado.  

El director gerente, Antonio Linares, se muestra satisfecho de haber logrado la continuidad de esta distinción. "Mantener este reconocimiento a la forma de trabajar de nuestros profesionales, poniendo lo mejor de cada uno de ellos en la atención de nuestros usuarios y más en la situación en la que nos encontramos debido al Covid19, es un aliciente más para seguir luchando y apostando por el cuidado de las personas que más lo necesitan, que son nuestra razón de ser", ha asegurado para agregar: "no cejaremos en nuestro empeño de mantener los más altos estándares de calidad, innovación y detalle por las cosas pequeñas del día a día, convirtiéndonos en referente de atención social y humana".

El equipo evaluador ha puesto énfasis en la calidad personal y profesional de los trabajadores de la fundación. También ha valorado la tarea desarrollada hasta ahora y los ha animado a seguir apostando por el trabajo bien hecho, sin dejar de lado los retos que seguirán viniendo. 

La fundación atiende diariamente a más de 400 personas con discapacidad intelectual -plazas concertadas con la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales de Andalucía- y mantener esta certificación supone "un impacto evidente en la calidad del trabajo que se desarrolla con los usuarios de cada uno de los recursos, comprometiéndose en el seguimiento y análisis de todas las acciones que se realizan, asegurando que las actividades asistenciales se lleven a cabo de manera establecida".

Su objetivo ahora, destaca la fundación, es seguir implementando actuaciones de mejora para optar al nivel superior de certificación cuando acabe la validez de la renovación de la recibida el próximo mes de enero de 2023.