Fallece el filólogo y académico de la RAE Gregorio Salvador

Cultura - IndeGranada - Sábado, 26 de Diciembre de 2020
Gregorio Salvador.
rae.es
Gregorio Salvador.

El filólogo y académico de la Real Academia Española (RAE) Gregorio Salvador Caja ha fallecido este 26 de diciembre en Madrid a los 93 años.

En un comunicado, la Real Academia Española (RAE) ha lamentado su fallecimiento y transmitido sus condolencias a su familia, amigos y compañeros académicos. 

Nacido en Cúllar el 11 de julio de 1927, era experto en lexicología y dialectología y ocupaba la letra q desde el 15 de febrero de 1987, cuando tomó posesión de su silla con un discurso que trataba precisamente sobre esa letra y al que le respondió, en nombre de la corporación, Manuel Alvar. Fue bibliotecario (1990-1998) y vicedirector (2000-2007) de la Academia y ocupó la presidencia de la ASALE entre 1992 y 1998.

A través de twitter, el escritor Arturo Pérez-Reverte ha informado del fallecimiento del escritor. "Acaba de morir, sentado en su casa y rodeado de libros, Gregorio Salvador, de la Real Academia Española. Tal vez, el último todavía en activo de los verdaderamente grandes. Era el académico perfecto", ha escrito sobre él, recordando que "durante 17 años nos sentamos uno junto al otro en las comisiones y en los plenos". Y que fue Salvador quien le dio la réplica a su discurso de ingreso en la RAE en 2003. "Era mi padrino en la RAE, y uno de los hombres a los que más quise y respeté en mi vida".

Precisamente ese ha sido el mensaje utilizado por el alcalde de Granada, Luis Salvador, para referirse a la muerte del escritor y académico de la RAE. "Las sinceras y sentidas palabras de @perezreverte denotan cariño y admiración. La misma que tenemos toda la familia al perder a uno de los mejores referentes intelectuales de nuestra querida España, mi tío Gregorio Salvador". 

Doctor en Filología Románica, Gregorio Salvador fue catedrático de Lengua Española en las universidades Autónoma y Complutense de Madrid y de Gramática Histórica en las de La Laguna y Granada. Estas dos últimas le nombraron doctor honoris causa, distinción que le otorgó también la Universidad de Alcalá de Henares.

Fue miembro de honor de la Asociación de Hispanistas de Asia, de la Asociación de la Prensa de Madrid, correspondiente de la Academia Nacional de Letras de Uruguay, de la Academia Chilena de la Lengua, de la Academia Argentina de Letras y de la Academia Hondureña de la Lengua. Fue académico honorario de la Academia Colombiana de la Lengua y de la Academia Nicaragüense de la Lengua. Fue presidente de la Sociedad Española de Lingüística (1990-1994).

Recibió la Medalla de Honor de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (2004) y los premios de periodismo José María Pemán (1987), Mesonero Romanos (1995), César González Ruano (2001) y Mariano de Cavia (2004). Contaba también, entre otros reconocimientos, con la Gran Cruz de la Orden Civil de Alfonso X el Sabio (1999) y la Medalla de Andalucía (2010).

Fue autor de una decena de obras filológicas, entre las que cabe citar el Atlas lingüístico y etnográfico de Andalucía (ALEA) —en colaboración con Manuel Alvar—, Semántica y lexicología del español (1985), Estudios dialectológicos (1987) y La lengua española, hoy, en colaboración con el también académico Manuel Seco (1995). Escribió igualmente obras de ficción, como Casualidades (1994), El eje del compás (2002) y Nocturno londinense y otros relatos (2006). Publicó, asimismo, recopilaciones de sus artículos periodísticos, con títulos como El destrozo educativo (2004) y El fútbol y la vida (2007).