Junta y Ayuntamiento han inaugurado el albercón del siglo XIII que se descubrió durante las obras del Metro en Alcázar del Genil. Unos importantes restos arqueológicos que se integraron de manera ejemplar en la estación con el diseño arquitectónico del fallecido Antonio Jiménez Torrecillas.

Los restos han permanecido cerrados al público y a partir de ahora ya se podrán visitar, tanto por los usuarios del Metro, como por el resto de la ciudadanía, que podrá acceder gratuitamente al albercón, ya que está ubicado antes la línea de validación de los títulos de viaje (tornos).

Se trata, ha dicho López, de "conectar la Ingeniería del siglo XIII con la del siglo XXI", elogiando la manera en la que el arquitecto logró integrar dos épocas sin "sacrificar" la funcionalidad del Metro ni la majestuosidad del patrimonio histórico.

Esta naumaquia era el lugar en el que los reyes árabes de la época almohade, en el Siglo XIII, tenía por costumbre simular, a escala real, batallas navales.

La integración de los restos arqueológicos y adecuación de la estación, avalada por la resolución de 2011 de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico, supuso una inversión adicional de 2,25 millones de euros.

Con la aportación del Ayuntamiento de Granada, en la zona de vestíbulo de la estación más próxima al acceso al albercón se han implantado equipamientos audiovisuales, como un plasma que recrea la inserción de este vestigio en la ruta, así como un tótem identificativo. Igualmente, el Consistorio ha desarrollado también una aplicación (APP) para smarthpone que facilita la visita guiada para la mejor interpretación de los restos arqueológicos en el interior del propio albercón.

Alcázar Genil constituye la cuarta estación por volumen de usuarios del Metropolitano de Granada, con una demanda media diaria de 1.100 usuarios.