La Sociedad Sierra Nevada lanza una campaña de recaudación de fondos para rehabilitar el emblemático edificio

SOS para salvar el histórico albergue San Francisco de Sierra Nevada

E+I+D+i - Redacción El Independiente de Granada - Jueves, 20 de Septiembre de 2018
La Sociedad Sierra Nevada, el club montañero en activo más antiguo de España, ha emprendido una campaña para sufragar la rehabilitación del centenario Albergue San Francisco, situado en los Campos de Otero, en pleno Parque Nacional, visible de lejos por su carismática cúpula roja, con el fin de ponerlo en funcionamiento y al servicio de todos los amantes de la montaña. Te contamos la excelente iniciativa y el excepcional valor del emblemático edificio, construido en 1915.
Vista posterior del albergue, en la que se aprecia el estado de deterioro.
Andarines
Vista posterior del albergue, en la que se aprecia el estado de deterioro.
La Sociedad Sierra Nevada ha iniciado una campaña con el fin de salvar el histórico albergue San Francisco, de gran valor cultural y patrimonial, primer edificio estable construido en Sierra Nevada, destinado a su aprovechamiento para el ocio, que fue refugio de montañeros y estación base de las primeras pistas de esquí, entonces, en el valle del Rio San Juan, y del primer remonte de la Sierra granadina, ya desaparecido.

La finalidad de esta campaña es salvar el Albergue de San Francisco de la destrucción provocada por el envejecimiento y la dura climatología. Y, con su futura rehabilitación y apertura al público en general, mejorar las infraestructuras de apoyo a las actividades de montaña en Sierra Nevada, informa la Sociedad Sierra Nevada.

El albergue San Francisco, no sólo es uno de los edificios más significativos del patrimonio arquitectónico de Sierra Nevada, sino que es un fiel testigo de la memoria histórica y cultural del macizo. Un verdadero símbolo

El Albergue de los Campos de Otero, de gran ingenio y originalidad, fue proyectado por Modesto Cendoya, arquitecto conservador de la Alhambra, resultando parcialmente destruido durante la Guerra Civil. Y, aunque quedó al margen de la nueva estación de Pradollano, en el vecino valle del rio Monachil, una parte de él permanece aún, como testimonio de la Historia de la Sierra y de los deportes de invierno.

El mantenimiento de este olvidado bien patrimonial, de todos los granadinos, ha estado a cargo de la Sociedad Sierra Nevada, club pionero y su titular, que, no obstante, ya no puede hacerse cargo de esta labor en solitario, por lo que lanza “un llamamiento a la sociedad en general y a los amantes de la montaña, para que se impliquen en la apremiante tarea de su conservación”.

“En tanto se emprenden otras acciones de más alcance que incluyan a administraciones e instituciones concernidas, de hecho, con estos fines, y dado el muy deteriorado estado del edificio, es necesario y urgente acometer su rehabilitación y puesta en uso". Por ello, la Sociedad Sierra Nevada solicita una donación, mediante ingreso en la cuenta: ES11 2100 9838 1402 0008 1192, de Caixabank.



Se levantó hace 103 años en los denominados Campos de Otero, hacia la cara norte de los Peñones de San Francisco, sobre la cota de los 2.250 metros, en la margen izquierda del valle del rio San Juan, término municipal de Güejar Sierra. Del singular edificio inicial, tras una azarosa historia y un prolongado olvido, hoy solo queda una parte, algo modificada sobre su estado original, mal conservada, pero aún significativa, y de alto valor patrimonial. Imagen de Andarines.

Marcha y comida solidaria

Para el próximo sábado 29 de septiembre, laa Sociedad Sierra Nevada convoca a los amantes de la montaña a colaborar en la rehabilitación del albergue para participar en una marcha y comida solidaria de presentación de la
campaña, que se celebrará en los Campos de Otero.
 
El acceso será caminando, bien libremente, con un cómodo paseo de 20 o 25 minutos, por el carril que comunica con la carretera de la Sierra, por el collado del Diablo, (previo a los Peñones de San Francisco).O bien participando en la marcha en grupo de entre 2 a 2 horas y media, que partirá desde las Casillas de Martínez (antigua carretera de la Sabina, a 1,5 km. del Centro de Visitantes El Dornajo), con salida a las 10,30 h.
 

Historia de un albergue emblemático

En 1912 se constituye la Sociedad Sierra Nevada, primer club montañero de Andalucía y tercero de España, (aunque segundo en activo), que promueve y sufraga la construcción del albergue. Las obras se inician en abril de 1913, mucho tiempo antes de que la Carretera de la Sierra llegara siquiera a sus inmediaciones, aprovechando materiales del lugar, según una ingeniosa y original idea arquitectónica. La dirección queda a cargo del ingeniero Julio Moreno y del arquitecto Modesto Cendoya, que sería conservador de la Alhambra entre 1907 y 1923, ambos miembros y vocales técnicos de la Sociedad. La construcción queda inacabada sobre el proyecto original, por falta de medios, y se da por concluida en diciembre de 1915, dando fecha al inicio de la historia de los deportes de invierno en Sierra Nevada, de la que la Sociedad Sierra Nevada y el Albergue son testimonio.

En 1938, durante la Guerra Civil, una acción de sabotaje destruye una parte importante del albergue San Francisco, que había quedado situado en pleno frente de guerra. Prácticamente abandonado y falto de cualquier reparación o mantenimiento durante los años posteriores, sólo la destacable solución adoptada en su construcción y la fortaleza de muros, bóvedas y cúpula evitó el colapso total del edificio. Ello no le impidió estar al servicio de los ganaderos de la zona.

Investigadores de la UGR ya pidieron rehabilitarlo por su gran valor patrimonial y cultural. Una investigación de la Universidad de Granada (UGR), difundida en febbrero de 2017, resaltó la necesidad de rehabilitar el Albergue San Francisco de Sierra Nevada a tenor su valor patrimonial y cultural, puesto que se trata de la construcción más antigua de Sierra Nevada vinculada al ocio y a la práctica del esquí.



Aquella investigación de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Edificación coincidía con el centenario del albergue (1915-2015) y profundizaba en sus antecedentes, orígenes y evolución, así como en la singularidad constructiva de este lugar del que "actualmente quedan unos restos mal conservados". Imagen de UGRDIVULGA, que muestra su aspecto original.
La consolidación de la estación de esquí en Pradollano, en el vecino valle del rio Monachil, el prolongado abandono y las duras condiciones climatológicas soportadas durante años, acabarían llevando a lo que quedó del Albergue tras la Guerra a un lamentable estado. A pesar de ello, una parte importante del mismo, toda la esquina izquierda, casi una cuarta parte del original, se obstinaba en mantenerse en pie y firme, a finales de los setenta. En una regeneración posterior de la zona, antes de su declaración de Parque Nacional, se elimina la parte derruida, a la vez que se acondicionan los restos del edificio conservado, recuperado como refugio de montaña.

En las últimas décadas, la Sociedad Sierra Nevada ha mantenido su agenda deportiva vinculada al uso del Albergue, llevando a cabo diversas intervenciones de mantenimiento del edificio. Estas acciones, en las que criterios prácticos y utilitarios, y tal vez la urgencia, se han impuesto al mayor rigor técnico, aunque han alterado el discreto exterior y la configuración interior del edificio original, han permitido, no obstante, que todavía se conserve el histórico Albergue, que, aún modificado, sigue siendo un exponente digno de su mejor pasado.

Otra imagen del emblemático albergue, con su peculiar cúpula roja. Andarines

El albergue San Francisco, no sólo es uno de los edificios más significativos del patrimonio arquitectónico de Sierra Nevada, sino que es un fiel testigo de la memoria histórica y cultural del macizo. Un verdadero símbolo. Es el germen de todo lo que hoy es Sierra Nevada: un gran activo natural, deportivo, cultural y económico de Granada, que goza de un gran reconocimiento nacional e internacional. Algo que un grupo de visionarios granadinos ya supieron anticipar hace algo más de un siglo. Personas, ideas y piedras se han ganado un respeto, que hay que conocer, valorar, proteger y trasmitir.

La Sociedad Sierra Nevada manifiesta su interés en reivindicar y rehabilitar el histórico y olvidado albergue San Francisco, tratando de recuperar, y de honrar, la idea y la memoria de sus promotores

Como subraya la Socidad Sierra Nevada es seña de identidad que aporta un alto valor histórico-cultural a Sierra Nevada. Un refugio de montaña que, bien conservado y racionalmente utilizado, puede amparar las actividades y prácticas deportivo-recreativas, sociales, culturales y educativas, acordes con ciertas demandas del ocio y turismo activo actuales. Además, por su situación y accesibilidad, puede contribuir a focalizar y regular el uso controlado del espacio protegido como lugar de esparcimiento, permitiendo el conocimiento y disfrute responsable de sus valores naturales y culturales. Parece pertinente, la necesidad de dar a conocer, valorar y proteger este singular legado arquitectónico, que representa además, una enorme distinción para el montañismo granadino.

Plan de rehabilitación: Un proyecto con futuro

La Sociedad Sierra Nevada manifiesta su interés en reivindicar y rehabilitar el histórico y olvidado albergue San Francisco, "tratando de recuperar, y de honrar, la idea y la memoria de sus promotores, para lo que pretende, en primera instancia, que el edificio actual sea rehabilitado según las exigencias y oportunidades de los nuevos tiempos, y pueda seguir prestando el noble servicio que dio, durante décadas, a sucesivas generaciones de granadinos, que descubrieron y amaron la Sierra junto a sus muros. Por ello, ahora limitada en su capacidad de gestión, la Sociedad Sierra Nevada se postula y pone a disposición de quien pueda y quiera actuar. Asimismo quiere trasladar a la opinión pública en general, el interés colectivo que ha de haber en su recuperación, pues se trata de un patrimonio común que no podemos dejar a su suerte".

En ese sentido, dado el deficiente estado actual del edificio, y a la espera de afrontar otras metas y objetivos más ambiciosos para el histórico albergue, actualmente, estiman necesario acometer una serie de trabajos urgentes en él, que se podrían realizar en sendas fases de intervención. Afectarían tanto al exterior, fundamentalmente destinados a recuperar la impermeabilización perdida de cubiertas y de fachadas, así como, en su caso, el aspecto estético original del edificio, aumentando su seguridad; como al interior, para reparar los daños sufridos por las humedades y el deterioro de materiales, y acondicionarlo, funcionalmente, para su uso de refugio de montaña activo.

Como resultado de estas obras, "podremos tener un refugio modesto pero totalmente funcional para 12-14 plazas, con un salón-comedor y zona de estancia diurna en planta baja, y una zona dormitorio en planta alta, que sería divisible en dos áreas de 6 literas más sofá-cama cada una, y ambas con sus correspondientes taquillas. Con cocina y aseo renovados, totalmente equipados, nuevas instalaciones, incluida calefacción y fosa séptica. Un altillo-dormitorio sobre la cocina, para una o dos personas, encargados de su explotación, custodia y mantenimiento, podrían permitir un uso regular del mismo durante todo el año, no solo para socios del club Sociedad Sierra Nevada!. Ejemplos similares de su viabilidad existen en otros macizos montañosos. Podría estar incluso vinculado a la revitalización del sendero SULAYR.