La Unidad de Urgencias del Hospital de Loja obtiene el reconocimiento de ‘Centro contra el dolor’

E+I+D+i - IndeGranada - Lunes, 27 de Julio de 2020
El distintivo, otorgado por la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía, reconoce las actuaciones puestas en marcha para mejorar la atención a personas con dolor.
El Hospital ha obtenido la certificación de 'Centro contra el dolor'.
Prensa Agencia Sanitaria Poniente
El Hospital ha obtenido la certificación de 'Centro contra el dolor'.

La Unidad de Urgencias del Hospital de Alta Resolución de Loja ha obtenido el distintivo de ‘Centros contra el dolor’, en su modalidad de ‘Urgencias-Emergencias’, que otorga la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía (AC-SA), a través del Observatorio para la Seguridad del Paciente. El fin de esta iniciativa es reconocer el trabajo de las entidades y profesionales que están comprometidos con el abordaje del dolor en los pacientes, según ha informado el centro.

Andalucía cuenta con un Plan Integral para su abordaje en todas las fases: prevención primaria, detección precoz, tratamiento y seguimiento. 

La directora asistencial del Hospital de Alta Resolución de Loja, Antonia Ortega, explica que "el dolor agudo es uno de los motivos más frecuentes de consulta en los servicios de urgencias, y en el caso de nuestro hospital, el certificado obtenido reconoce el trabajo que llevan a cabo nuestros profesionales para un abordaje integral, transversal y coordinado del dolor". 

Para la obtención del distintivo de ‘Centros contra el Dolor’ se verifican por parte del Observatorio de la Seguridad del Paciente aspectos como la aplicación de una Escala Visual Analógica (EVA), para poder hacer el seguimiento del dolor durante el ingreso del paciente, así como la aplicación de distintas técnicas para su alivio durante todo el proceso asistencial en Urgencias.  En función de los resultados de la evaluación del dolor mediante la escala EVA se asigna al paciente un nivel de prioridad u otro y a lo largo de la estancia en el área se reevalúa su situación, además de ofrecer recomendaciones al alta, garantizando así la continuidad asistencial. 

El programa ‘Centros contra el dolor’ pretende fomentar la adopción de buenas prácticas en la atención del paciente con dolor, ofreciendo a los centros y unidades sanitarias unos criterios de calidad con los que guiar y mejorar su atención a estas personas. 

Para ello, la Agencia ofrece a los centros y unidades en torno a 70 recomendaciones -elaboradas por un comité técnico asesor- que abordan diversos aspectos relativos a la información que se proporciona al paciente sobre el abor-daje del dolor, la formación de los profesionales, la evaluación sistemática del dolor, el tratamiento del dolor en el proceso asistencial, el seguimiento del pa-ciente, mejoras posibles, y estructura organizativa que mejor apoya la atención al dolor.

Las recomendaciones constituyen un patrón de referencia para la autoevalua-ción que los centros y unidades realizan para ser reconocidos como ‘Centros contra el dolor’. Gracias a esta autoevaluación, los profesionales pueden comprobar el nivel de implantación en su centro de una serie de buenas prácticas relacionadas con el abordaje del dolor, que posteriormente son evaluadas por el Observatorio para la Seguridad del Paciente. 

Una de cada seis personas presenta dolor crónico

Esta iniciativa se desarrolla en el marco de la Estrategia para la Seguridad del Paciente y del Plan Andaluz de Atención a las Personas con Dolor de la Consejería de Salud y Familias. Este plan se puso en marcha en 2009, con el objetivo de ofrecer una respuesta integral a un problema muy frecuente en la población -una de cada 6 personas presenta dolor crónico- que repercute en la calidad de vida de las personas y supone una carga importante para los sistemas sanitarios.

A través de esta herramienta, se trabaja de forma proactiva e integrada, articulando acciones de prevención y detección precoz así como de tratamiento sobre la base de la evidencia científica. También se aborda el dolor en el sistema sanitario público a través de la puesta en marcha de modelos organizativos que garanticen equidad en el acceso a los servicios, y mediante una apuesta por la formación y la investigación para avanzar en calidad asistencial y seguridad; por último, una pieza fundamental es el aumento de la participación de los pacientes en el manejo de su propia situación de dolor.

Esta estrategia presta especial atención a las poblaciones vulnerables, como son la población infantil, las personas mayores, las personas con problemas de salud mental y las personas discapacitadas. Hasta ahora, el desarrollo del Plan ha permitido que el 80% de los problemas de dolor sea abordado en Atención Primaria, con un fuerte protagonismo de la enfermería.