El alcalde de Granada, Francisco Cuenca, se reúne este lunes en Sevilla con el presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, en el primer encuentro institucional que mantienen desde que el socialista fue investido alcalde el pasado julio. Al encuentro acude Cuenca con al aspiración de establecer con la Junta "una alianza por Granada" para afrontar la recuperación social y económica ante la crisis provocada por la pandemia.

"Estamos en un momento crucial, en el que, entre todos y con mucho esfuerzo, ya se nota que estamos en un momento de reactivación de la vida, la cultura y el ocio", ha señalado Cuenca en unas declaraciones remitidas a los medios en las que enfatiza que es "el momento de establecer una alianza por Granada". 

Entre las reivindicaciones, las ayudas directas a comercio y hostelería de Granada que la Junta prometió por los cierres del pasado año y, sin embargo, no se han recibido

A la mesa de la reunión con el presidente el alcalde lleva como reivindicaciones un plan de empleo, programas de intervención de viviendas -que reclama para La Chana o Zona Norte, además de la regeneración en marcha de Santa Adela, pendiente de nuevas fases- y un plan de ayudas directo comercio y hotelería. La Junta había prometido ese plan por los cierres que a finales de 2020, cuando en otros puntos de Andalucía se mantenía la actividad no esencial con limitaciones de horarios, afectaron a comercios y hostelería de Granada por el duro impacto de la pandemia en ese momento. También planteará a la Junta ayudas para aliviar la mala calidad del aire que sufren Granada y el Área Metropolitana.

"En definitiva -ha resumido Cuenca-, un pacto por Granada para ponernos de acuerdo y sacar adelante esta ciudad", como el que se está impulsando en el seno de la corporación y al que de momento solo se ha sumado Unidas Podemos. 

La reunión con Moreno se produce tras llegar de nuevo Cuenca a la Alcaldía, esta vez por un error de estrategia del PP, que con la dimisión de todos los ediles de su grupo trató de forzar la salida de Luis Salvador. La grave crisis municipal terminó por romper los puentes en Granada entre los dos socios, Ciudadanos y PP, cuyas direcciones andaluzas antepusieron en todo momento sus intereses en la Junta a la situación del Ayuntamiento granadino. También derivó en la expulsión de Luis Salvador y José Antonio Huertas de Ciudadanos.