'Endesa culpable'
Los problemas de suministro eléctrico en la ciudad de Granada, especialmente en la zona Norte de Granada, tienen un culpable: Endesa. Podemos darle mil vueltas al asunto, pero entonces nos estaremos perdiendo en excusas. Miles de vecinos y vecinas de la ciudad de Granada tienen un contrato de suministro, pagan sus recibos religiosamente y no tienen luz durante muchas horas, incluso durante días. Y sólo hay un culpable: Endesa.
Este, y no otro, es el meollo de la cuestión. Y mientras las autoridades no se centren en eso en primer lugar, el problema de los cortes de luz no podrá solucionarse.
Creer que la lucha policial va a solventar el problema de luz en Granada es hacerse trampas al solitario
Porque el cultivo de marihuana es causa y consecuencia de otro problema más grave, no sólo el de los cortes de luz, sino la situación de exclusión que se vive en la zona Norte y en otros barrios de Granada: Haza Grande, Chana, Zaidín o distrito Centro. La pobreza es la otra pata en la que las administraciones tienen que poner el asunto. Y cada cual, Endesa y administraciones, tienen que poner remedio a esta situación. Creer que la lucha policial va a solventar el problema de luz en Granada es hacerse trampas al solitario.
Vivimos en un mundo complejo, donde no existen las soluciones simples. Pero eso no quiere decir que no exista solución. La pobreza tiene raíces estructurales y requiere de soluciones múltiples. Fiarlo todo a la lucha policial, insisto, es condenar a miles de familias a sufrir cortes de luz por los siglos de los siglos.
La crisis económica de 2008, y la salida que los poderes fácticos planificaron, condenaba a millones de personas a la exclusión. Hoy, se nos puede llenar la boca de muchas cosas, pero si de verdad queremos acercarnos a comprender el problema, lo que no podemos hacer es criminalizar a aquel que no le hemos dado salida. Ahora la marihuana ha generado un problema de primer orden y muestra las vergüenzas de todos y todas. Es el peaje que estamos pagando. Sobre todo aquellos vecinos y vecinas que han resistido como han podido: echando horas, con pequeñas pensiones, a trompicones, para llevar una vida humilde pero digna, y que hoy sufren constantes cortes de luz.
Por cierto, que algún día esta ciudad, la sociedad en su conjunto, deberá reconocer como se merece el papel de la mujer en el seno de esas familias, para mantenerlas y sacarlas adelante. Algún día se reconocerá el papel de la mujer trabajadora de la zona Norte que ha peleado por cada trozo de pan para su familia, para que sus hijos e hijas no falten al colegio, para que sus maridos no se derrumben ante la situación de desempleo que vivían, y que viven ahora también con la pandemia.
Endesa tiene que invertir mucho más en la mejora de las instalaciones obsoletas que tiene y garantizar el servicio a sus clientes
Endesa tiene que invertir mucho más en la mejora de las instalaciones obsoletas que tiene y garantizar el servicio a sus clientes. La marihuana no puede ser su excusa. Y Ayuntamiento, Junta de Andalucía y Gobierno de España debe arbitrar un plan de lucha contra la exclusión cargado de inteligencia y de millones, con la vista larga en el tiempo. Debe ser un trabajo de varias generaciones si no queremos condenar a miles de familias a algo peor que los cortes de luz: la exclusión social.
Para eso necesitamos un Ayuntamiento que lidere este proceso de transformación social. Luego que venga toda la policía que tenga que venir, o mientras tanto, pero por favor, dejemos de engañarnos.
