Artículo de Opinión por Leticia García Panal, candidata a las primarias de Podemos con Granada Imagina Andalucía

'El Podemos original'

Política - Leticia García Panal - Miércoles, 11 de Julio de 2018
Leticia García Panal, candidata a las primarias de Podemos con Granada Imagina Andalucía, reflexiona en este artículo de opinión sobre la deriva que a su juicio ha tomado la formación y reivindica el que llama "Podemos original".
Leticia García Panal con los otros integrantes que la acompañan en la candidatura.
Granada Imagina Andalucía
Leticia García Panal con los otros integrantes que la acompañan en la candidatura.

Podemos no nació siendo un partido sino un movimiento. Surgido de la indignación, acogió en su seno distintas sensibilidades que tenían en común la impugnación de un sistema injusto y antidemocrático. Podemos fue el aglutinante que unió a personas que  llevaban luchando toda la vida, a las abstencionistas desencantadas y a la ciudadanía que nunca antes había participado en política. No era necesario abrazar ningún credo ni demostrar pureza de sangre ideológica. Podemos era un movimiento plural.

La participación de la ciudadanía  en política era el antídoto contra todas las enfermedades del sistema. La democracia directa defendía mejor los intereses propios que el sistema representativo que acababa secuestrando la voluntad y el entendimiento de quienes les representaba. El activismo político frente a la profesionalidad en política. Podemos era un mecanismo de participación política.

Podemos tenía una metodología novedosa y atractiva en el debate político. En aquellas primeras asambleas había una voluntad sincera de integrar las distintas opiniones y de llegar a acuerdos compartidos. Era la lección que habíamos aprendido en las plazas durante el 15 M, usar una metodología que facilitaba el consenso y escuchaba las diferencias.

El objetivo inmediato de la actividad política tenía que ser el alivio del sufrimiento de la gente. Esto se hacía a través de los movimientos sociales y con la participación en las instituciones. En los gobiernos apostando por una gestión defensora del bien común. En el parlamento, legislando normas que favorecieran la igualdad, la justicia y la democracia. Leyes contra los desahucios, contra la explotación laboral, a favor de la igualdad y de las libertades públicas. Podemos intentaba solucionar los problemas reales de la gente.

Esto era Podemos hace apenas tres años. La experiencia política más original y transformadora en la historia reciente de España. Con mucha ingenuidad si se quiere pero con una carga de ilusión y entusiasmo enorme. Lo mejor que nos ha pasado a cuantos no aceptamos resignadamente la injusticia presentada como el orden natural de las cosas.

"Sin embargo el sectarismo instalado en la dirección dificulta ese movimiento acogedor y plural"

Sin embargo el sectarismo instalado en la dirección dificulta ese movimiento acogedor y plural. La fidelidad a las ideas ha sido sustituida por la fidelidad a los nombres propios. La discrepancia, sinónimo de riqueza, se castiga. La lista de aquellas personas que  se van o andan con desánimo cada vez es mayor. La cooptación, mecanismo para el ascenso en los partidos tradicionales se ha instalado en la organización interna.

A pesar de lo que se dice, los círculos han aminorado su actividad. Sus estructuras internas suspendidas sin que hubiera recambio. De activistas empoderadas y con iniciativas hemos pasado a militantes con pasividad. El movimiento horizontal se ha jerarquizado. En Granada tenemos el único coordinador provincial de todo el espectro político que no ha sido elegido directamente por las inscritas. La coordinadora provincial es un tablón de anuncios para informarse de las decisiones de otras personas. La pureza ideológica y el encasillamiento en el eje tradicional izquierda-derecha nos condenan a la irrelevancia a la hora de poner en práctica medidas en favor de la gente.

Pero la idea original sigue siendo buena. Se pueden corregir algunas ingenuidades idealistas pero el Podemos inclusivo, amable y participativo todavía es posible. Se puede recuperar aquel instrumento en manos de la gente para mejorar sus condiciones de vida. Aquel genial invento que hizo abdicar a un rey, que el Ibex se gastara los cuartos en un recambio para el PP y que en las reuniones del PSOE se volviera a cantar La Internacional. Esa es nuestra apuesta. Por eso seguimos aquí. Por eso estamos aquí.

Leticia García Panal. Granada Imagina Andalucía.