25N

La Asamblea Feminista Unitaria alerta de que "las violencias machistas son una parte fundamental del funcionar cotidiano"

Ciudadanía - IndeGranada - Miércoles, 23 de Noviembre de 2022
El colectivo marchará este 25 de noviembre desde el Triunfo hasta el Salón, en la manifestación del movimiento feminista granadino.
La manifestación partirá del Triunfo al Salón.
AFU
La manifestación partirá del Triunfo al Salón.

"Enfrentamos violencias machistas en todas las dimensiones en las que la vida se desarrolla", advierte la Asamblea Feminista Unitaria ante el 25 de noviembre en un manifiesto en el que denuncia esta situación y llama a movilizarse. 

Ante esta situación, hace hincapié la Asamblea, es necesario "crear vínculos para defendernos". 

"Hay que seguir gritando alto y claro que, "¡si tocan a una nos tocan a todas!", concluye el manifiesto que reproducimos, en su integridad, a continuación: 

"Este 25 de Noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres salimos a la calle otra vez para denunciar que las violencias machistas nos atraviesan a todes, todas y todos, y que son una parte fundamental del funcionar cotidiano del sistema en el que vivimos.

En España, desde 2003 se han registrado 1171 mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas. Actualmente, una mujer es asesinada por su pareja o expareja cada 6 días. Las denuncias por violencia machista han aumentado un 70,8% entre las adolescentes desde 2020. Se denuncia una violación cada 4 horas y 2 agresiones sexuales a la hora. Solo se denuncian el 11% de las violaciones. Entre los motivos más citados para no denunciar encontramos vergüenza, miedo a no ser creídas, miedo al agresor.

Enfrentamos violencias machistas en todas las dimensiones en las que la vida se desarrolla.

Desde lo más cercano e íntimo (esos lugares en los que “existimos”); la casa, los cuidados, la distribución desigual del placer; a lo más lejano y “público” (esos lugares a los que a veces “vamos”); los juzgados, las alianzas financieras internacionales, las guerras interestatales. 

Entre lo “uno” y lo “otro” hay una multitud de violencias machistas que no cesan; escuelas, redes sociales, instancias médicas, los centros de trabajo, la calle, el ocio, los desahucios, el diseño de las ciudades. En todas las esferas sociales aparecen las vidas de las mujeres subordinadas a la ganancia y privilegio de las vidas dominantes.

Salimos a la calle para señalar estas violencias, identificarlas, reconocerlas y entonces ser capaces, colectivamente de transformar las dinámicas que las hacen posible. Pero no se trata solo de querer eliminar las violencias que nos oprimen, sino de entender que esto implica transformar al sistema en el que vivimos, porque una cosa no es posible sin la otra: el sistema necesita las violencias y las violencias posibilitan la reproducción de este sistema.

Hay unos cuerpos cuya cotidianidad está marcada por el tránsito constante por los lugares de más violencia; las mujeres migrantes, las racializadas, las trans, las presas. La violencia específica que las políticas de fronteras ejercen sobre las mujeres y disidencias sexo/género es posible porque en su base encontramos la lógica jerárquica y patriarcal que construye a algunas vidas/pueblos/etnias/naciones como más valiosas que otras. Entendemos así que los sistemas de dominación están imbricados/superpuestos los unos con los otros.

Las cárceles en sí mismas no se pueden entender sin un modo de pensamiento que prioriza el castigo a la justicia y la reparación, que construye el binarismo víctima/verdugo a semejanza del binarismo sexual, que no busca generar agentes sino siervas.

Nos duele la aceptación de las políticas de muerte y el interés económico creciente que despoja de humanidad a quienes tratan de cruzar las múltiples líneas que nos separan de una “otredad” construida para el beneficio de unos pocos; y nos recordamos que las fronteras no terminan en el mar ni en las vallas, que en este territorio viven cientos de miles de personas en situación de No Derecho a consecuencia de una Ley de Extranjería racista e injusta, en la “Europa de los Derechos Humanos”. El movimiento #RegularizacionYA continúa recogiendo firmas para una regularización extraordinaria y sin condiciones de estas personas en España, el apoyo de todas las personas mayores de 18 años y con DNI español es imprescindible y urgente, así como la movilización de todes, más allá de las firmas, para construir una sociedad digna.

Nos parece fundamental denunciar la negación sistemática de las identidades de nuestras compañeras trans como una violencia machista. Es por esto que este 25N exigimos la aprobación de la Ley Trans y LGTBI, el derecho a la autodeterminación y su reconocimiento para poner fin a violencias tan sangrantes como la falta de acceso a unas condiciones dignas de trabajo.

Mujeres en distintas sociedades siguen enfrentando las opresiones que las afectan: la revolución del velo en Irán, la lucha de nuevo por el derecho al aborto en EE.UU, las luchas de nuestras compañeras en Afganistán, Kurdistán, la República Árabe Saharaui Democráctica, etc

Mujeres en distintas sociedades siguen enfrentando las opresiones que las afectan: la revolución del velo en Irán, la lucha de nuevo por el derecho al aborto en EE.UU, las luchas de nuestras compañeras en Afganistán, Kurdistán, la República Árabe Saharaui Democráctica, etc. Atravesadas por los intereses del Norte Global y ninguneadas por la “sociedad internacional”. Denunciamos que el extractivismo occidental, los conflictos y guerras que provocan y sus consecuencias son una forma de violencia. La lucha contra el capitalismo y neoliberalismo requiere la construcción de vínculos y alianzas para abordar una intersección de sistemas que violentan a las mujeres en todas las sociedades, lo cual evidencia la necesidad de tener un claro posicionamiento antirracista y anticolonial en nuestras prácticas feministas y seguir reclamando que ninguna mujer será libre mientras siga habiendo mujeres sometidas.

Entendemos que como parte de los engranajes podemos ser al mismo tiempo oprimides y opresores. Y por tanto también es necesario señalar, identificar, y reconocer las violencias entre nosotras. Por eso pensamos que son fundamentales los espacios de encuentro y reflexión, feministas, plurales, de acción e incidencia. Que frente a la violencia es imprescindible construir vínculos para defendernos, contenernos, encontrarnos, compartir, cuidarnos. Que es desde este andar y aprendizaje colectivo en constante movimiento y fluctuación, que podemos conseguir transformarnos a nosotras para poder transformar las cosas.

Este año conmemoramos el 25 aniversario de la denuncia pública de maltrato que hiciera la granadina Ana Orantes, por lo que fue cruelmente asesinada y que supuso un antes y un después en la lucha contra la violencia de género y cuya genealogía es fundamental reconocer para seguir gritando alto y claro que:

¡SI TOCAN A UNA, NOS TOCAN A TODAS!

Por lo que seguimos,

CONSTRUYENDO VÍNCULOS Y CUIDADOS CONTRA EL HETEROPATRIARCADO".