Granada apuesta por mejorar la red de transporte público y propiciar el cambio de calderas de calefacción para afrontar el problema de la contaminación

Ciudadanía - IndeGranada - Jueves, 29 de Diciembre de 2016
Descarta medidas como las de Madrid de restringir la circulación de vehículos según la matrícula.

El Ayuntamiento de Granada centrará sus esfuerzos en fomentar el uso del transporte público, mejorando la red, y en propiciar el cambio de calderas de calefacción ya obsoletas para reducir la contaminación atmosférica, "un gran problema que tenemos en toda España" y que "al final es una cuestión de salud".

Así lo ha señalado el alcalde, Francisco Cuenca, a preguntas de los periodistas sobre la actuación de oficio abierta por el Defensor del Pueblo ante este grave problema. En total, la institución que preside Soledad Becerril ha reclamado información a 14 ciudades. En el caso de Granada, según los últimos informes de Ecologistas en Acción, se encuentra entre las ciudades con más niveles de contaminación.

Cuenca ha defendido las medidas que ya está llevado a cabo el Ayuntamiento, que apuesta por la necesidad de "concienciación colectiva" para afrontar el problema, apostando por compartir vehículos, no utilizar el vehículo privado y optar por el transporte público o el uso de la bicicleta como "única manera" de reducir las emisiones de C02. 

También se ha referido a las medidas para fomentar el transporte y mejorar la red puestas en marcha por el Ayuntamiento. En este sentido, el alcalde ha admitido que no solo se puede pedir que se use el transporte público, sino que esta petición debe ir acompañada por iniciativas para que "este funcione mejor". Al respecto ha añadido que el gobiern local trabaja en la actualización del plan de movilidad, "con visión metropolitana". 

Ha asegurado que las medidas no se centran únicamente en el tráfico, también en las calderas de calefacción que son, según ha recordado Cuenca, el segundo motivo de contaminación en la ciudad. En ese sentido ha avanzado los planes municipales para propiciar el cambio de calderas obsoletas, que podrían incluso convertirlo en una obligación para las comunidades en determinados casos.