Un helicóptero de la Guardia Civil descubre un cultivo de solo 12 plantas de marihuana en el patio de una casa del Valle de Lecrín

Ciudadanía - IndeGranada - Miércoles, 22 de Julio de 2020
El propietario, requerido por los agentes, entregó 11 plantas e intentó guardarse una.
Helicóptero de la Guardia Civil.
wikipedia
Helicóptero de la Guardia Civil.

La Guardia Civil ha descubierto una pequeña plantación de cannabis sativa en una vivienda, y se ha incautado de doce plantas, al sobrevolar con el helicóptero las distintas localidades del Valle de Lecrín, en una operación que tenía como finalidad localizar este tipo de plantaciones de exterior, que no escapan, por pequeñas que sean, a la vigilancia de los agentes.

En esta actuación contra el cultivo ilegal de cannabis sativa, la Guardia Civil ha investigado al propietario de la vivienda donde crecían las plantas, un individuo de 60 años de edad, con antecedentes policiales, como presunto autor de un delito contra la salud pública por cultivo de droga.

La Guardia Civil explica que, mientras el cultivo intensivo de cannabis dentro de una vivienda genera una serie de indicios que permiten su localización, como el alto consumo de electricidad, los ruidos de los aparatos de aire acondicionado funcionando todo el día o el olor característico de estas plantas; localizar las plantaciones que crecen al aire libre "es algo más complicado".

Por ello los agentes de la Unidad Aérea de la Guardia Civil realizan vuelos de manera regular por la provincia de Granada para detectar desde el aire plantaciones de cannabis sativa.

En la primera operación, el pasado día 10 de junio de 2020, los pilotos de la Guardia Civil descubrieron 14 plantaciones de cannabis sativa al sobrevolar la localidad de Escóznar, una actuación en la que la Guardia Civil se incautó de 2.700 plantas de distintos tamaños. 

En otra actuación realizada este martes en el Valle de Lecrín, los agentes de la Unidad Aérea se coordinaron con una patrulla de Seguridad Ciudadana de la Compañía de la Guardia Civil de Órgiva y cuando los pilotos descubrieron desde el aire una plantación en el patio de una vivienda, alertaron a los agentes en tierra y les indicaron cuál era la casa. Los guardias civiles se entrevistaron con el propietario y este, al verse descubierto, accedió a arrancar y entregarles las plantas de marihuana. Al poco rato el investigado salió con once plantas y e hizo entrega de ellas. La Guardia Civil, no obstante, al ver las once plantas le insistió sobre si las había entregado todas y acabó reconociendo que no. El investigado volvió a entrar a la casa y salió poco después con la última planta y se la entregó a los agentes.