La recuperación de proyectos como el Cierre del Anillo obliga a aumentar las garantías

El incierto futuro de la protección del Valle del Darro

Cultura - María Andrade - Domingo, 21 de Noviembre de 2021
La iniciativa que lidera la UGR abre la esperanza a la protección de este enclave de alto valor paisajístico y cultural como Bien de Interés Cultural, que elude ahora la Junta. Lo analizamos.
Vista del Valle del Darro desde el entorno de la Acequia Real de la Alhambra.
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Vista del Valle del Darro desde el entorno de la Acequia Real de la Alhambra.
"Los argumentos de carácter patrimonial que avalan el procedimiento de inscripción como Bien de Interés Cultural a favor de la Zona Patrimonial del Valle del Darro son sustanciales. De la ocupación del valle existen evidencias desde época romana hasta nuestros días, alcanzando periodos de máximo esplendor como la época medieval y manifestaciones de gran brillantez en épocas sucesivas, diseminadas por el territorio y agrupadas también en el ámbito urbano de Granada. 

Entre los yacimientos romanos se han identificado una villa y otras estructuras de envergadura junto al Cortijo de Cortes, cerca de la confluencia con el arroyo de Beas.

Por su parte, la Edad Media es un hito en la evolución histórica de este territorio, alquerías medievales, construcciones con funciones defensivas y la ciudadela amurallada de la Alhambra constituyen ejemplos sobresalientes de esta etapa. Se configura en este periodo un territorio que se articula en torno al sistema hidraúlico y su cohorte de elementos asociados (presas, puentes, puentes acueductos, aljibes, albercas o fuentes) y la histórica red viaria. En él se diseminan elementos vinculados a diversos ámbitos de explotación (vegas agrícolas, espacios de aprovechamiento ganadero, además de las explotaciones mineras, caleras...), y en él se va formalizando un patrimonio intangible de gran valor en relación con los usos del agua y los usos ganaderos. 

Tras la conquista cristiana se suceden construcciones residenciales y religiosas, tanto en el núcleo urbano de la ciudad de Granada como en las extensas zonas rústicas que conforman en valle, con elementos de extraordinaria relevancia como la hacienda jesuítica de Jesús del Valle o la abadía barroca de El Sacromonte, que junto a iglesias mudéjares, palacios urbanos, cortijos y cármenes conforman un conjunto patrimonial de primer orden, todo ello enmarcado en un sobresaliente espacio natural rico y diferenciado que caracteriza los distintos tramos del río
".

El texto que precede resume el significado del Valle del Darro -que discurre por los términos de Beas de Granada, Huétor Santillán y Granada-, y forma parte del decreto de la Consejería de Cultura con el que, en 2017, se acordó -tras un largo proceso con movilización ciudadana- su inscripción en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz como Bien de Interés Cultural, con la tipología de Zona Patrimonial. Un procedimiento que quedó anulado por sentencia del TSJA que adquirió condición de firme en noviembre de 2020. 

La sentencia anuló el procedimiento, al considerar que un propietario afectado no fue notificado correctamente. Pero lo que no queda anulado es el valor de este singular territorio, sin el que no se entiende, cabecera abajo, la ciudad de Granada, el Sacromonte o la propia Alhambra. 

Así se lo han trasladado al presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, la rectora de la UGR, Pilar Aranda, los directores de los cinco centros del CSIC con sede en Granada, y la directora de la Real Academia de Bellas Artes. Con Pilar Aranda al frente de la iniciativa, este extraordinario movimiento rompe con esa sensación de que Granada no se moviliza, algo tan necesario, y sitúa a instituciones de gran prestigio ejerciendo ese liderazgo. 

Con Pilar Aranda al frente de la iniciativa, este extraordinario movimiento rompe con esa sensación de que Granada no se moviliza, algo tan necesario, y sitúa a instituciones de gran prestigio ejerciendo ese liderazgo

Este extraordinario paso no llega únicamente por la anulación del expediente, sino por la intención de la Junta de Andalucía de dejarlo aparcado. No fue eso lo que el Gobierno andaluz trasladó el pasado año, cuando El Independiente de Granada informó de que Cultura no había recurrido la sentencia. Entonces, la Delegación Territorial se apresuró a decir que lo iba a retomar. Transcurrido un año desde que la sentencia se convirtiera en firme, de nuevo este diario sacó a la luz los planes de la Junta: esperar tres años, como poco. La Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico esgrime la Ley de Patrimonio Histórico de Andalucía para cumplir ese plazo. La norma recoge que, cuando se declara la caducidad de un expediente BIC, es necesario esperar ese tiempo sin retomarlo de nuevo. Esperar, a menos que así lo reclamen instituciones como la Universidad de Granada, como ha ocurrido. 

Claves en esta alianza en defensa del Valle del Darro han sido algunos movimientos en ámbitos culturales y políticos, como viene informando este diario. Reynaldo Fernández Manzano no dudó en alzar la voz, contundente pero sosegadamente, como es el estilo del que fuera director de la Alhambra, para romper el inmovilismo. Nadie como él conoce lo que significa el Valle del Darro que defiende. Un trabajo que también ha ejercido la vicepresidenta segunda del Parlamento, la socialista Teresa Jiménez, buscando respuestas ante la cuestionada interpretación jurídica de la Junta y con iniciativas que ya hace un año instaban a la Junta a aclarar sus planes. Y el grupo municipal de Unidas Podemos Independientes de Granada, cuyo portavoz, Antonio Cambril, pidió a las tres instituciones que solicitaran la reactivación del expediente

La Junta de Andalucía no quiere darse por enterada del paso que lidera la UGR y la consejera de Cultura trató de zanjar este asunto resaltando que lo importante es "la voluntad", que según ella existe

De momento, la Junta de Andalucía no quiere, al menos públicamente, darse por enterada. La consejera de Cultura y Patrimonio Histórico, Patricia del Pozo, insistió este viernes en Granada, a preguntas de los periodistas, en que la ley obliga a cumplir ese plazo. Esa interpretación de la norma que hace Cultura, equiparando la nulidad del expediente BIC dictada por el TSJA con la caducidad del expediente, es cuestionada por los servicios jurídicos de la propia Universidad. Lo argumentan en el escrito dirigido a la Presidencia de la Junta. Pero Cultura insiste.

Ignorando la implicación de la propia UGR o el CSIC, la consejera Del Pozo trazó de zanjar la pregunta sobre la situación del Valle del Darro asegurando que lo importante es "la voluntad" de retomar en su día el expediente. Y esa, según la consejera, existe. 

La consejera de Cultura, entre la directora de la Alhambra y el alcalde de Granada, esta semana en una visita a la ciudad. junta de andalucía

Las palabras de Del Pozo dejaron, por cierto, en mal lugar al concejal del PP Luis González, quien como responsable de Urbanismo del bipartito a buen seguro tuvo que conocer los planes de la Junta. Pero para desviar la atención, además de insistir en la idea de que ya hay protección suficiente, el pasado jueves llegó a manifestar que "nadie" decía que hubiera que esperar tres años. Sí, lo dicen la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico, su titular y su delegado territorial.

Pero la insistencia de la Delegación Territorial en considerar suficiente la protección que ahora le otorgan los planes generales -bien sea el Potaug o el propio PGOU de Granada-. Es suelo no urbanizable de especial protección, resalta Antonio Granados cuando se refiere a este asunto. Una insistencia que suscita dudas, por si detrás llegara la siguiente pregunta: 'para qué más protección'. O la siguiente afirmación: 'no necesita la protección BIC'.

El Valle del Darro necesita un plus de protección, el que le otorga su consideración como Bien de Interés Cultural

Pero el Valle del Darro necesita un plus de protección, el que le otorga su consideración como Bien de Interés Cultural. Porque han coincidido en el tiempo la decisión judicial de anularla con la decisión de la Junta de Andalucía de retomar un proyecto de carretera que puso sus miras en este entorno. El mal llamado Cierre del Anillo. La construcción de la Ronda Este, tras doce años aparcada, ha sido retomada por el Gobierno andaluz de PP y Cs. La Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio que dirige Marifrán Carazo ha encargado el estudio informativo. 

Informó de ello en septiembre y, según consta en el portal de contratación pública de la Junta, el pasado 15 de noviembre fue adjudicado a Actividades de Consultoría Técnica Investigación y Servicios Avanzados SSL. El plazo de ejecución es de 12 meses, así que en un año estará finalizado. Para entonces, habrán pasado dos desde que decayera el BIC del Valle. Quedaría aún otro en blanco, según los cálculos de Cultura. 

La Junta insiste en que el proyecto de la Ronda Este será respetuoso y también que no pondrá en peligro el Valle, pero su construcción, sea como sea, traslada presión urbanística a su entorno. Antonio Cambril lo explica con estas palabras cuando se refiere a ello: la construcción de una carretera implica establecer una nueva "frontera urbanística".

Y eso es lo que se pretende evitar, como recoge el escrito enviado al presidente. Acabar con la "preocupación en cuanto a una posible amenaza de especulación urbanística".

Las zonas que pueden identificarse dentro del ámbito del Valle del Darro:

Cabeceras del Darro: corresponde con el tramo del río desde la fuente de los Porqueros hasta la confluencia con el río de Beas.

Arroyos de Beas y Belén: tramo de río comprendido entre la confluencia del río Beas y el punto de encuentro del Barranco de Belén, a la altura de la Presa Real; comprende los terrenos irrigados por estos cauces, así como las lomas de Buena Vista y las masas boscosas del Alto de las Tres Torres.

Jesús del Valle: comprende los terrenos de fondo de valle en torno a la Hacienda, entre la Presa Real y el barranco del Teatino, ampliándose la protección a las laderas de solana de las lomas del Hospicio y Buenavista, y la umbría de Buenavista y Jesús del Valle.

Valparaíso-Sacromonte: tramo del cauce de carácter periurbano que recorre los arrabales de la ciudad, entre el barranco del Teatino y el puente del Rey Chico. El ámbito remonta por las laderas de solana del barrio del Sacromonte, englobando los cerros de Monte Jate y San Miguel. Zona E. Dehesa del Generalife: terrenos adscritos en su mayoría al monte público de la Dehesa del Generalife, además de los terrenos del Cerro del Sol y El Hoyo de la Campana.

Darro Monumental: tramo del río de carácter estrictamente urbano que recorre la ciudad, entre las colinas de la Sabika y del Albaicín, desde el puente de del Rey Chico hasta el embovedado de la plaza de Santa Ana.

Darro palatino: sector definido por el BIC Alhambra-Generalife y el borde urbano de su entorno inmediato.

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