Un preso conflictivo "en tránsito" agrede a varios funcionarios de la cárcel de Albolote

Los sindicatos CSIF y CCOO han denunciado y condenado una nueva agresión producida en la prisión de Albolote. Esta vez se trata de un preso calificado como peligroso, que se encontraba en la noche del lunes “en tránsito” en el cárcel de Albolote, solamente para pernoctar, en su tralsado desde el centro penitenciario Puerto (Cádiz) al de Brians (Barcelona). Según detallan los delegados de CSIF en la prisión granadina, el interno mostró un comportamiento desafiante y peligroso desde su llegada, exigiendo ver a su pareja, también interna, y amenazando a los funcionarios, a los que llegó a lanzar amenazas como “ya he matado a dos y no me importa uno más”.
Ante esta actitud intimidatoria y violenta, donde el interno amenazó de muerte a los funcionarios si no accedían a sus peticiones, según relata CSIF, el jefe de Servicios acudió a la celda acompañado de varios funcionarios para intentar reconducir la situación. “Lejos de colaborar, el interno insultó, empujó y se encaró con el mando”, aseguran los delegados sindicales de CSIF, por lo que se ordenó su traslado a régimen cerrado y durante el descenso por las escaleras, el interno se giró de manera súbita, golpeó a un funcionario y propinó una patada al jefe de Servicios, haciéndolo caer violentamente por los peldaños y golpeándose en la pared, lo que le causó una brecha en la cabeza con sangrado, así como latigazo cervical y abdominal. A consecuencia de esta grave agresión, el jefe de Servicios resultó lesionado de consideración y tres funcionarios heridos, por lo que posteriormente requirieron de atención sanitaria en urgencias debido a la gravedad de los golpes sufridos durante la reducción de dicho interno.
Según indica CCOO, el agresor, un preso ya calificado como peligroso, presentaba incompatibilidades en otras prisiones, por acumulación de incidentes (peleas y agresiones a otros internos y funcionarios). CCOO lleva años pidiendo que Albolote no sea un centro de tránsitos (los internos pernoctan cuando van de conducción a otros centros) ya que hay prisiones mejor ubicadas en Andalucía y con una plantilla más rejuvenecida.
Escalada de violencia
CSIF ha denunciado que este suceso "es una prueba más de la alarmante escalada de violencia que se vive en las prisiones españolas en la actualidad". En total, en lo que va de año, se han contabilizado 504 agresiones a personal funcionario en los centros penitenciarios del país, según el portal de Transparencia del propio Ministerio del Interior. Ante la falta de medios, de personal y de protección con la que los profesionales deben enfrentarse diariamente a internos extremadamente peligrosos, cada 17 horas y 24 minutos se produce una agresión a personal penitenciario en España.
La organización sindical ha señalado que factores como la masificación de la población reclusa, la escasez de profesionales, la nula separación interior y la falta de realismo por parte de los responsables han desembocado en una situación "insostenible" en el centro penitenciario de Albolote, que es uno de los más masificados del país con alrededor de 1.264 internos, una cuestión que complica la labor diaria y multiplica el riesgo de agresiones a la plantilla.
Piden medidas inmediatas
Por ello, CSIF Granada ha reclamado a la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias medidas contundentes, inmediatas y reales que garanticen la seguridad de los trabajadores de prisiones. Entre ellas, el refuerzo de plantillas al 100 %, la cobertura de vacantes con agilidad, una formación continua presencial y de calidad para atender a la población reclusa que presente problemas de salud mental, uniformes adecuados para el desempeño de su labor, además de una actualización de los medios coercitivos, como las táser, para afrontar situaciones muy complejas y peligrosas como las que se producen en las prisiones. Por último, el sindicato ha reclamado retribuciones justas y el reconocimiento del personal de prisiones como agentes de la autoridad, una reivindicación histórica de CSIF.
Por su parte, Cecilia Vargas, delegada de CCOO en la Prisión de Albolote, denuncia que el PEAFA (Protocolo de actuación frente a las agresiones en prisiones) firmado por todas las organizaciones sindicales salvo por CCOO, "no funciona". Y por ello que el sindicato reclama que las agresiones deben ser tratadas desde la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. “No funciona porque actúa una vez producida la agresión y no la previene, tampoco se presta ningún tipo de asistencia psicológica a las personas agredidas”, advierte la delegada sindical.
COO afirma que esta última agresión no es un hecho aislado ya que hace solo unas semanas otro interno golpeó fuertemente a un funcionario en la cara, rompiéndole la nariz y necesitando intervención quirúrgica.

























