Ejemplos que demuestran que la de Granada es de las organizaciones más conservadoras de todo el PP

El franquismo que aún late en el PP

Política - Juan I. Pérez - Domingo, 30 de Julio de 2017
Absolutamente todos los partidos, inevitablemente, mantienen en sus respectivas organizaciones distintas sensibilidades dentro de los valores y postulados que defienden o que rechazan. En el PP late aún un corazón demasiado permisivo con el franquismo que campa a sus anchas, ante el silencio de la dirección, que se siente cómodo con estos ultras en sus filas.

Si las corrientes internas de los partidos sobrepasan los márgenes establecidos por los propios estatutos o las leyes comunes, las organizaciones suelen expulsarlos, si antes no se apartan voluntariamente al no sentirse ya identificados.

En el PP, un partido netamente conservador, su espectro ideológico es tan amplio, que con naturalidad cohabitan los moderados más centrados hasta los que defienden posiciones extremas. Sin duda, una de sus ventajas electorales, puesto que a su derecha, nada existe.

El PP malvive con la Memoria Democrática; un grave problema para la derecha española, incapaz de asumir, de superar y de acatar

Sea por mantener ese voto extremo, o por la presencia ideológica de un ala ultra que se siente cómoda con la patria, bandera, centralismo, y religión, por supuesto, católica, el PP no termina de desvincularse de ese poso rancio, radicalmente conservador, herencia de su fundador, Manuel Fraga Iribarne, que bien que aprendió como destacado ministro de Franco. Fraga da nombre a la sala más noble de la sede provincial del PP.

En estos días de conmemoración del Golpe de Estado que acabó con la II República, el PP de Granada ha tenido sobradas oportunidades de desvincularse con ese pasado. Pero el PP malvive con la Memoria Democrática; un grave problema para la derecha española, incapaz de asumirla y de acatarla.

El impresionante Memorial se levanta frente a la tapia del cementerio. J.ALGARRA/AYUNTAMIENTO

El último episodio que lo demuestra sucedió esta semana en el último pleno del Ayuntamiento de Granada. El PP votó en contra de una moción del portavoz de IU, Francisco Puentedura, que requería al Arzobispado que cumpla la Ley de Memoria Democrática y retire de la fachada del Sagrario el rótulo de Primo de Rivera.

"No se puede seguir viviendo del revanchismo y el odio", dijo el concejal del PP Juan Antonio Fuentes. ¿Revanchismo? ¿Qué revanchismo?

Y solo se trata de aplicar la Ley. Como si esta norma tuviera menos rango que el Código Penal, el Civil, o cualquiera de los estatutos de autonomía

Las excusas de los populares de Granada, cuya incomodidad es manifiesta cuando en público deben intervenir sobre todo lo relacionado con el franquismo, son casi siempre las mismas: “que no habían nacido”, “que no vivieron el franquismo” (como si para asumir o no una ideología hubiera que haber vivido su nacimiento), que “nada de lecciones de democracia”…. Y solo se trata de aplicar la Ley. Como si esta norma tuviera menos rango que el Código Penal, el Civil, o cualquiera de los estatutos de autonomía.

O que si no es “una preocupación ciudadana”, lo notoriamente sí lo es, al menos, para las familias de los cien mil republicanos desaparecidos y que yacen en las cunetas de España. Ni para las asociaciones memorialistas, los partidos de izquierda que les apoyan, en un pais gobernado por Rajoy con una izquierda mayoriataria enfrente. Ningún país cobija aún bajo tierra tal cantidad de desaparecidos. 

El presidente del PP, Mariano Rajoy, marca el camino al despreciar la Ley de Memoria Democrática, aprobada bajo el mandato del socialista José Luis Rodríguez Zapatero. Lo hizo en una reciente entrevista en la que presumió de no destinar “ni un euro” en estos cuatro años en los que preside el Gobierno.

A partir de ahí, habitual escuchar a responsables populares despreciar la Memoria Democrática. Como Pablo Casado con aquello de que “los de izquierdas son unos carcas, todo el día con la fosa de no sé quién, con las guerras del abuelo, con la Memoria”. Hoy es vicesecretario general de Comunicación del PP. 

Rafael Hernando calificó de "entretenimiento" la búsqueda de familiares desaparecidos, dice  que le “gusta que los muertos descansen en paz" y lo más deleznable aún si es posible: “Las víctimas del franquismo solo se acuerdan de sus padres cuando hay subvenciones". Es portavoz del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso de los Diputados.

Los sucesivos gobiernos de Rajoy han concedido subvenciones a la Fundación Francisco Franco.

Sebastián Pérez, presidente provincial del PP, llegó a decir cuando la Junta obligó al Ayuntamiento de Granada que gobernaban los populares a retirar el monolito a José Antonio Primo de Rivera: “No vamos a deshonrar la figura de un artista con un acto talibán progresista, porque romper una obra de arte porque no les gusta es lo que hacen los talibanes progres”. El monolito ante Bibataubín fue levantado por una suscripción popular que lideró su padre, Sebastián Pérez Linares, falangista y subjefe provincial del Movimiento.



Las asociaciones memorialistas exigieron a Sebastián Pérez, por razones obvias –“Es como poner con una mano flores a Federico y con la otra hacer el saludo falangista a los asesinos del poeta", dijeron entonces que no presidieran los actos del tradicional homenaje a Federico en Alfacar cuando estaba al frente de la Diputación. Aquel lema de ‘Lorca vive’ causaba estupor.

En Alemania, pais al que tanto gusta mirarse el PP, seria un grave delito.

Pero son muchos otros los ejemplos que desgraciadamente brinda el PP de Granada. Su presidente provincial, en un intento de descalificarlos emplea la 'izquierda más radical" a los partidos que no son ni ellos ni Ciudadanos. Pero por la actitud de algunos de sus integrantes y la permisividad con la que actúan, el PP de Granada sin duda es una de las organizaciones más conservadoras de todo el PP, a pesar de algunos y algunas voces cualificadas que desaprueban estas conductas.

Uno de los más sonados, por la gran repercusión mediática, tras desvelarlo El independiente de Granada, fue el durísimo ataque que sufrió Juan Pinilla en las redes sociales por los dos concejales del PP de Huétor Tájar, después de que la figura del flamenco, activista y comprometido, bisnieto del último alcalde republicano del pueblo, asesinado por los fascistas, recriminara en Facebook la utilización de los símbolos franquista.

'Meme' elogiado por el edil Javier Funes, que luego retiró.

El silencio de la dirección del PP de Granada ante semejantes insultos habló por si solo y decepcionó, incluso, a miembros destacados de los populares granadinos, que desaprueban tajantemente el flirteo de algunos miembros del partido

El silencio de la dirección del PP de Granada ante semejantes insultos habló por si solo y decepcionó, incluso, a miembros destacados de los populares granadinos, que desaprueban tajantemente el flirteo de algunos miembros del partido, como el de los ediles de Huétor Tájar.

“El día que acepten que perdieron la guerra, ese día, se podrá vivir, se podrá respirar, se podrá convivir entre unos y otros con mayor respeto, y por supuesto, se podrá vivir”,  le espetó uno de los dos concejales, el portavoz, Javier Funes, el más extremista en sus planteamientos.

El otro edil, Carlos Guzmán, dejó escrito: “En tu texto veo mucho rencor, ese que hace que en nuestro país no se pase página de una tragedia como fue la guerra civil”.

Todo ello, con ‘memes’, como el que subió Javier Funes, con Franco que decía que volvía, con un texto suyo que señalaba, ‘¡Ojalá!

Intolerable. Ni expediente abierto, ni reprobación pública. Absoluta impunidad.

‘Que vaya a los tribunales’

El ataque al cantaor llegó al pleno de la Diputación de Granada. Juan Pinilla es Hijo Predilecto de la Provincia, la máxima distinción de la institución provincial, concedida el año pasado.

El portavoz de IU, Juan Francisco Arenas, lo trasladó en una moción que pedía el apoyo expreso de la Diputación a Juan Pinilla ate los ataques sufridos. El PP votó en contra. Inexplicable. Rosa Fuentes, concejal de Íllora, en nombre del Grupo Popular defendió la negativa a apoyar la moción. Pero en su inexplicable justificación –“esto es para desviar la atención de la mala gestión en Huetor Tájar”, dijo- salió en defensa de los dos concejales de su partido en el pueblo, cuando la moción de IU no los citaba.

En 2008, cuando el entonces juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón requirió en una providencia al Ayuntamiento de Granada que le notificara los asesinados por la represión franquista enterrados en el cementerio, el gobierno municipal del PP aludió a numerosas dificultades para cumplir el mandamiento judicial. La Universidad tardó solo 22 días en mandar al juez listado con 6.376 desaparecidos.



El gobierno municipal, finalmente, envió una lista con 515 nombres, fusilados y enterrados en el cementerio de San José entre el 20 de marzo de 1939 hasta 1945. Argumentó que los archivos de estos casos fueron destruidos por el último gobierno franquista y que en sucesivas reformas, se fueron perdiendo más. El impresionante Memorial inaugurado el pasado jueves acredita a casi 4.000.

Además, durante la etapa de Torres Hurtado las placas que las asociaciones memorialistas fueron colocando en la tapia del cementerio para recordar a las víctimas fueron todas retiradas
Tras atenerse al guión prescrito por los populares para pasar el maltrago –que nunca asumen los portavoces oficiales- llegó a decir que si Juan Pinilla se sintió ofendido “que vaya a los tribunales”.

Otra ocasión perdida para romper cadenas con el franquismo y quienes en el PP lo defienden.

 

'Glorioso alzamiento’

Hace un año, la concejala del PP de Granada Telesfora Ruiz dejó perplejos a todos y a todas cuando en la Comisión delegada de Presidencia, Empleo, Igualdad y Transparencia corrió con un "glorioso alzamiento nacional” al portavoz de IU, Francisco Puentedura, quien pedía que se cumpliera el acuerdo de pleno para dar el nombre de los alcaldes republicanos de Granada a calles de la ciudad.

Telesfora Ruiz en una ueda de prensa cuando gobernaba el PP. IndeGranada

Puentedura explicaba en la comisión que era un "buen momento para cumplir el acuerdo del Ayuntamiento" de hace dos años para dar una calle a los alcaldes democráticos republicanos porque se cumplían –en 2016- 80 años de la "sublevación fascista" del 18 de julio. En ese momento fue interrumpido por Telesfora Ruiz, quien le espetó que no era una "sublevación", sino "glorioso alzamiento nacional”.

La concejal de Presidencia, la socialista Ana Muñoz, lo consideró una "barbaridad" y añadió que "si esto es una muestra de donde sigue instalado el PP, queda mucho tiempo de reeducación, para corregir estas actitudes.

El incidente sentó más que mal a la portavoz del grupo municipal popular, Rocío Díaz, que reprendió a la concejala.

En ese momento fue interrumpido por Telesfora Ruiz, quien le espetó que no era una "sublevación", sino "glorioso alzamiento nacional”.

El PP quedó de nuevo en evidencia por su silencio.

‘Arriba España’

En noviembre de 2015, en un acto de partido en Granada en la sede del PP con María dolores de Cospedal, la secretaria general del PP andaluz, Dolores López, afirmó durante su intervención: "Nosotros no somos 17 partidos, eso son otros, nosotros somos un partido en 17 comunidades con un único mensaje, y lo decía antes aquella señora, arriba España".

Perplejos. La secretaria general se disculpó luego y dijo que “en la intensidad de un mitin pude utilizar una expresión desafortunada que no va conmigo. En realidad quise decir ¡Viva España!". Pero la señora que lo gritó entre el reducido público asistente e indujo a error a la portavoz del PP andaluz no se disculpo que se sepa.

El presidente del PP andaluz, Juan Manuel Moreno, tuvo que salir al paso y restar importancia a la declaración al señalar que "todo el mundo que conoce a la secretaria general sabe que es una persona centrada, moderada y prudente", por lo que imaginó que lo hizo "en tono jocoso".

Entre tanto estupor, destaca la actitud del parlamentario andaluz del PP por Granada, Juan Ramón Ferreira que asistió el pasado jueves a la inauguración del impresionante Memorial dedicado a las cuatro mil victimas asesinadas en la Tapia del Cementerio de Granada. Ferreira fue el ponente del PP de la Ley de Memoria Democrática de Andalucía, aprobado en marzo en el Parlamento andaluz.