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Juzgados de Motril. google maps

El Juzgado de Primera Instancia número 3 de Motril ha dictado un auto exonerando, de forma definitiva el 100% de la deuda que acumuló un vecino de Motril tras su incapacidad laboral reconocida hace una década. El Juzgado aplica la conocida como Ley de Segunda Oportunidad, que le permitirá "comenzar de cero", según informa la Asociación de Ayuda al Endeudamiento, que se felicita por haber cerrado "este complejo expediente con éxito". 

El protagonista de este caso, según expone el colectivo, es un pensionista por invalidez desde hace más de 10 años. La disminución de los ingresos mensuales provocó "ciertas dificultades para pagar sus cuotas mensuales". Por ello, "decidió solicitar microcréditos para no generar impagos e ir tirando".

El hombre solicitó microcréditos "para no generar impagos e ir tirando" pero terminó generando una "bola de nieve" hasta que "le fue imposible asumir algunas cuotas"

"Al principio parecía una buena idea, pero al poco tiempo se dio cuenta que el problema sería el mismo. Generó una “bola de nieve” hasta que le fue imposible asumir algunas cuotas. La deuda ahora crecía exponencialmente y con un interés mayor, debido a las condiciones típicas de estos microcréditos. Temiendo el embargo sobre sus únicos ingresos, este motrileño decidió buscar alguna salida a su problema", expone la asociación. 

Fue entonces cuando contactó con la Asociación de Ayuda al Endeudamiento. Tras el estudio minucioso de su caso, los letrados de la entidad aconsejaron acogerse a la Ley de la Segunda Oportunidad.

José Domínguez, abogado de la Asociación de Ayuda al Endeudamiento, detalla la decisión de tramitar este proceso: "la condición de insolvente era notoria desde que sus ingresos cambiaron. Pedir más créditos para pagar los anteriores solo sirve si se espera una mejora en la condición económica y se estudia muy en detalle las condiciones de los nuevos préstamos, pero rara vez es recomendable".

Solo con empezar el proceso ya obtuvo "un respiro económico importante": la paralización de cualquier pago por los préstamos y tarjetas. Además, cualquier ejecución o embargo "quedaba en suspenso hasta que el caso se resolviera". Otra ventaja que no debe pasar por alto, según la asociación, es que "cesó considerablemente el acoso de los acreedores, permitiendo una mejora en la salud del asociado".

El segundo paso consistía en presentar "un intento de acuerdo a todos los acreedores para demostrar la buena fe del deudor". Como bien explica Domínguez, "este deja de ser un requisito para acogerse a la Ley de la Segunda Oportunidad desde el 26 de septiembre de 2022. "Los acreedores por regla general siempre rechazaban o no atendían a las propuestas de convenio. Es una buena noticia que no sea preceptivo, ya que se agilizan los trámites, se acortan tiempos y se ahorran costes en honorarios de notaría y mediador concursal, el cual deja de existir".

Esto se convirtió, según la nota del colectivo informando de este caso, "en la mejor noticia, dado que ya quedaba demostrada la buena fe del interesado y optaba a conseguir la cancelación y perdón de todo lo que debía. Tras ello, se solicitó al Juzgado de Motril que se exonerara el 100% de los préstamos solicitados, aprobados y permitiéndole comenzar de cero".

Además, el asociado ha conseguido mantener el coche en propiedad. Se relata en el auto judicial. Es un vehículo con más de 250.000 kilómetros valorado en unos 3.200 euros y que precisa una reparación de unos 1.000 euros. Esto hace que sacarlo a la venta para saldar parte de la deuda sea "una medida antieconómica", porque le obligaría a buscar alternativa para sus desplazamientos, e "ineficaz" para conseguir "entrada significativa de liquidez".

Requisitos que marca la Ley de la Segunda Oportunidad para condonar el total de las deudas

Para acogerse al procedimiento, según la asociación, es necesario cumplir una serie de requisitos, que han cambiado con la reforma concursal. Estos son: la insolvencia del interesado, no haber estado en concurso los últimos 5 años, no haberse exonerado en los últimos 10 y carecer de delitos de orden socioeconómico.

Una vez comprobados estos presupuestos se dictó la resolución definitiva concediendo el BEPI (Beneficio de Exoneración del Pasivo Insatisfecho) ha supuesto dejar a este deudor libre de pagar 44.616 euros.

Con esta sentencia los acreedores del concursado -entre ellos Codifis, Caixabank, Moneyman, Vivus o Unicaja - no podrán reclamar ningún pago más ni incluir en fichero de morosos al ya ex-deudor.

Más de 85 exoneraciones conseguidas durante el 2022 por la Asociación de Ayuda al Endeudamiento han demostrado la importancia de este procedimiento ante el aumento de la insolvencia en España. Todas las sentencias emitidas son de acceso gratuito en su web