La secretaria general de UGT-A, Carmen Castilla, ha participado hoy en la concentración que realizan los trabajadores y trabajadoras de Endesa en su sede de Sevilla, y ha mostrado su apoyo a los que mantienen el encierro indefinido desde el pasado viernes. Posteriormente, Carmen Castilla, junto a una delegación de UGT, se ha reunido con el director territorial de Endesa en Andalucía, Extremadura, Ceuta, Melilla y Canarias, Francisco Arteaga, a quien le ha trasladado la preocupación del sindicato por "la grave situación que sufre la plantilla, con un convenio bloqueado desde hace dos años, y la falta de inversiones en mantenimiento, lo que ha provocado ya accidentes laborales mortales y la caída de la red en distintos puntos de Andalucía, aunque la más grave ocurrió en Tenerife a final de setiembre, cuando toda la isla se quedó sin luz durante nueve horas, por una subestación deteriorada".

En Andalucía hay 2.200 trabajadores de Endesa, 1.200 de ellos en Sevilla, y la empresa ha anunciado ya el cierre de la térmica de Carboneras, en Almería. También es probable en cierre de As Pontes, en Galicia.

UGT FICA acusa a la empresa matriz, la italiana Enel, de "descapitalizar Endesa, y de querer desmantelar, poco a poco la compañía eléctrica más importante de España, poniendo en peligro miles de puestos de trabajo".

La semana pasada, el director general de Trabajo instó a la dirección de Endesa a someterse a un "arbitraje voluntario que permita desbloquear la situación".

Mientras tanto, delegados UGT Endesa mantienen el encierro en la sede administrativa de la Avenida de Borbolla, en Sevilla, y organizan asambleas todos los días a las doce del mediodía, para informar a los trabajadores y trabajadoras de si se ha producido algún avance en la negociación. Encierro que coincide en el tiempo con otro en los servicios centrales en Madrid.

UGT FICA quiere resaltar que el principal escollo en la negociación no es la tarifa del empleado, que Endesa ha retirado ya a los jubilados, sino la situación de inestabilidad, con un convenio que decayó en enero, cuando se llevaba negociando un año; y el desmantelamiento de la compañía.