El grupo socialista en el Ayuntamiento de Granada ha instado a la alcaldesa, Marifrán Carazo" a retomar el plan de control de Ocupación de la Vía Pública impulsado en el mandato anterior "para proteger 27 puntos del centro que por sus características debían estar libres de terrazas, como por el ejemplo la Plaza de Los Lobos, entre otras". Al respecto el portavoz del PSOE, Francisco Cuenca, ha mostrado su preocupación después de que el PP reflejara en los presupuestos su intención de doblar el número de terrazas actual, "lo que provocará una situación de saturación mayor de la que en estos momentos existe"”. 

Para el socialista, "se hace necesario revisar la ocupación del espacio público en algunas zonas, ya que la permisividad del PP en la ampliación del número de terrazas está provocando una saturación sin precedentes en una ciudad que nunca ha estado tan mal". Al respecto, ha reclamado al gobierno popular "un mayor control sobre los espacios públicos de la ciudad notablemente perjudicados tras la política de permisividad y recaudación que impera desde que Carazo llegará al Ayuntamiento". 

Cuenca ha detallado que "existen verdaderos puntos negros de la ciudad donde el paso de los viandantes se hace realmente complicado, y donde el descontrol está teniendo unas consecuencias nefastas para un espacio que ha sido literalmente arrebatado a los granadinos y granadinas". "Hay plazas emblemáticas y muy turísticas donde entre las terrazas y las aglomeraciones de personas se producen situaciones de peligro e inseguridad en caso de que fuera necesaria una evacuación", ha señalado.  

"Es inconcebible que esta señora quiera basar su gestión en engrosar las arcas municipales a costa de saturar el espacio público a uno niveles que ya rozan la inseguridad"

Desde el PSOE se ha criticado además que "la falta de control está provocando que en algunos puntos se aumente el número de mesas sin autorización", por lo que se hace necesario "volver a la política de control porque no es justo para los granadinos y granadinas, ni para los hosteleros que sí pagan religiosamente por el número de mesas que tienen instaladas". 

Ha hecho un llamamiento a la alcaldesa "para que sea sensible a este tema", al tiempo que le ha recriminado que "la recaudación no puede justificarlo todo. Es inconcebible que esta señora quiera basar su gestión en engrosar las arcas municipales a costa de saturar el espacio público a uno niveles que ya rozan la inseguridad".