Desplome de un sector clave de la economía provincial

Las pernoctaciones hoteleras caen un 70% en julio en la provincia de Granada

E+I+D+i - J. M. M. - Martes, 25 de Agosto de 2020
Más de un tercio de los hoteles permanecieron cerrados y las plantillas se redujeron a la mitad.

Playa de San Cristóbal, en Almuñécar, el primer domingo de julio. Ayto. Almuñécar

Era evidente que el turismo estaba entre los sectores que más difícil iba a tener su recuperación tras el confinamiento. Pero el sector confiaba en que, tras el fin del estado de alarma, la apertura de fronteras y la ausencia de restricciones a la movilidad pudiera servir al menos para salvar mínimamente el verano, después de varios meses con los hoteles cerrados. 

Sin embargo, el primer mes de temporada alta turística ha cumplido con las peores expectativas y se ha saldado en Granada con un desplome de las pernoctaciones hoteleras, que cayeron un 70% en julio en la provincia de Granada respecto a julio de 2019, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Una caída en línea con lo ocurrido a nivel nacional, donde fue incluso superior, ya que las pernoctaciones bajaron un 73,4% en toda España

Lo cierto es que las playas granadinas no han presentado un mal aspecto durante julio, con varias de ellas completando su aforo, pero solo durante los fines de semana, y también es sabido que a las playas de la provincia suelen acudir, precisamente, personas de Granada, sin incidencia sobre la ocupación hotelera.  

Durante julio se alojaron en los hoteles de la provincia 87.646 viajeros, que realizaron 181.470 pernoctaciones. Las cifras no tienen nada que ver con las del año pasado, lastradas por la crisis del coronavirus y el miedo al contagio por los numerosos rebrotes que se han ido sucediendo desde el fin del estado de alarma. El número de turistas es un 67% inferior a los casi 267.000 de julio de 2019, y las pernoctaciones suponen un 70% menos que las más de 600.000 del año pasado en ese mes. 

El turismo extranjero, simbólico

La caída ha sido mucho mayor en el turismo extranjero, prácticamente simbólico. En julio vinieron a Granada tan solo 13.253 viajeros extranjeros, frente a los 124.127 de julio de 2019, un desplome de casi el 90%. Por su parte, el turismo nacional no cayó tanto, pero se redujo a la mitad: 74.444 viajeros españoles, por los 142.554 del mismo mes del año pasado. 

Ha habido muchos hoteles que ni siquiera abrieron sus puertas en julio: de los 405 que había operativos el verano pasado, este pasado julio solo 260 ofrecían alojamiento, un 34% menos. El total de habitaciones ofertadas, 20.823, ha sido un 38% inferior a las de julio del año pasado. 

Además, los hoteles han funcionado aún con menos plantilla que la que le correspondería con ese nivel de oferta. Mientras que la reducción de habitaciones en la planta hotelera granadina ha sido del 38%, las plantillas han disminuido un 54% de forma global. En julio del año pasado los hoteles de la provincia emplearon a 3.856 personas y este pasado julio solo a 1.701

Más caída en la capital

La caída del turismo se ha notado especialmente en la capital granadina que en el resto de la provincia. En Granada capital, que atrae más de la mitad de todo el turismo provincial, el desplome ha sido del 75% en el número de viajeros: únicamente 38.235 se alojaron en los hoteles de la ciudad en julio, frente a los 152.383 de ese mes en 2019.

La capital acusa todavía más la ausencia de turismo extranjero, que es el que suele predominar sobre todo en verano, mientras que en el conjunto de la provincia el visitante nacional es algo más numeroso que el foráneo.