Avanzan los trabajos para intervenir en fosas de víctimas del franquismo de Víznar y Cúllar Vega

Cultura - Europa Press - Domingo, 6 de Agosto de 2017
Colaboración entre la Asociación Granada para la Recuperación de la Memoria Histórica y la Junta.
Rafael Gil Bracero.
psoe-granada.com
Rafael Gil Bracero.

La Asociación Granadina para la Recuperación de la Memoria Histórica está colaborando con la Junta de Andalucía para la excavación, en fecha aún por determinar, de fosas en las que está documentada la presencia de restos que podrían ser de fusilados del franquismo en Víznar y Cúllar Vega, en el área metropolitana de la provincia.

Según ha explicado a Europa Press el presidente de la Asociación Granadina para la Recuperación de la Memoria Histórica, Rafael Gil Bracero, el inicio de los trámites de la administración autonómica para las actuaciones en las dos localidades granadinas se basa en el trabajo desarrollado previamente por esta entidad sin ánimo de lucro con sondeos en la zona.

En el entorno del Barranco de Víznar en el que cada año en agosto se recuerda a Federico García Lorca, hay distintas fosas en las que, según una de estas catas, hay evidencias de restos humanos sin ser éste un "lugar de enterramiento normal". Ello se ha puesto en conocimiento de la Dirección General de Memoria Democrática de la Junta de Andalucía para seguir el protocolo que marca la ley.

Rafael Gil Bracero ha subrayado la colaboración abierta con la Universidad de Granada para recoger muestras genéticas de los restos que pudieran aparecer en la fase de excavación arqueológica de estos sitios, que no están documentados y en los que "fueron arrojadas cientos de personas". De este modo, los familiares que pudieran tener indicios de que antepasados suyos desaparecieron en este entorno podrán optar a identificarlos, mediante una prueba comparativa con saliva del descendiente.

Hasta llegar a este punto, los miembros de la Asociación Granadina para la Recuperación de la Memoria Histórica han llevado a cabo un trabajo de preparación de información preliminar para el Comité Técnico de Coordinación de Exhumaciones responsable de que la administración dé el visto bueno a excavaciones, con base en varias catas que se hicieron en los años 2013 y 2014 en Víznar, y en 2015 en Cúllar Vega.

Para las futuras intervenciones, la Junta habrá de nombrar un equipo técnico de arqueólogos y antropólogos, ha agregado Gil Bracero, que no ha tenido conocimiento de los plazos que se barajan para ello.

Los expertos de la asociación memorialista trabajan, en paralelo, en otros emplazamientos de la provincia en localidades como Gualchos, Pinos del Valle o Lecrín, para recabar información que poner a disposición del comité técnico, el cual ha de tener siempre el mayor "respaldo científico de que ahí hay evidencias de restos humanos".

La Junta de Andalucía ha abierto recientemente el plazo de alegaciones en relación con futuras actuaciones relacionadas con la localización, exhumación e identificación genética de restos en fosas localizadas en 20 municipios andaluces de las provincias de Almería, Cádiz, Córdoba, Granada, Huelva, Jaén y Sevilla.

El Comité Técnico de Coordinación de Exhumaciones compuesto por miembros de la administración andaluza, colectivos memorialistas de dilatada trayectoria en la comunidad y representantes de ayuntamientos, diputaciones y la Federación Andaluza de Municipios y Provincias, decidió en su última reunión celebrada el pasado mes de julio el inicio de los trámites para el desarrollo de actuaciones específicas en fosas de estos municipios andaluces.

Las actuaciones propuestas contemplan desde la indagación y la investigación histórica, la localización y señalización de espacios que pudieran albergar fosas comunes, hasta la exhumación y estudio antropológico de los restos y análisis genético que pudiera posibilitar su identificación, en caso de que fueran localizadas las fosas.

En Granada, un memorial recuerda desde la semana pasada los nombres y apellidos de las más de 3.600 personas víctimas de la represión franquista que fueron fusiladas en la tapia del cementerio de San José, así como las referencias de otras 600 represaliadas sin identificar.