Cuando las fotos de Granada y de los granadinos no podían salir en prensa
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Entre 1869 y 1891 los fotógrafos de Granada enviaban a Madrid fotos que no podían ser reproducidas directamente: las reconvertían en dibujos muy cuidados
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Fue la revista gráfica Blanco y Negro la que ofreció la primera imagen de Granada en el año 1891: una escena de gitanos en el Sacromonte
La primera fotografía en daguerrotipo que se hizo en Granada data de 1840. La primera copia en papel a partir de calotipo es de 1851. Muy pronto empezaron a circular copias en papel fotográfico e impresiones postales de una ciudad que los románticos calificaban como la más hermosa del mundo.
Existe un daguerrotipo del Patio de los Leones de la Alhambra ya en la temprana fecha de 1840. Se le considera la primera imagen fotográfica de la ciudad
Existe un daguerrotipo del Patio de los Leones de la Alhambra ya en la temprana fecha de 1840. Se le considera la primera imagen fotográfica de la ciudad. Pero hubo que esperar hasta 1851 a que King Tenison hiciera sus primeras reproducciones de vistas de Granada a partir de calotipos; este novedoso sistema ya permitía hacer copias a partir de un método similar al negativo posterior. La década de 1850 multiplicó las imágenes de la ciudad de Granada; pero sólo reproducidas en papel fotográfico o sistemas similares artesanales. Nunca en tiradas masivas de imprenta.
Los medios de comunicación de masas –periódicos y revistas- todavía no contaban con sistemas de reproducción e impresión de imágenes fotográficas. A lo sumo, insertaban dibujos de línea. Pero la clientela empezaba a demandar menos letras y más imágenes. Surgieron en Alemania y Estados Unidos revistas gráficas, llenas de ilustraciones de línea.
A finales de 1873, Ricardo Madrazo envió a la revista madrileña uno de sus dibujos a plumilla titulado “Puerta de la Justicia”; 'La Ilustración' dio a conocer a toda España, de manera masiva, cómo era la entrada principal a La Alhambra
En España se tardó bastante en secundar aquella moda de prensa gráfica. La primera iniciativa de enjundia de carácter nacional fue La Ilustración Española y Americana, surgida en 1869 y activa hasta 1921. Fue en esta Ilustración donde aparecieron los primeros dibujos de Granada y sus monumentos. Le había precedido el Museo Universal (1857-69), pero sin presencia de temas granadinos. Después vinieron Blanco y Negro (1891), Nuevo Mundo (1894), Mundo Gráfico (1911), La Esfera (1914)…
A finales de 1873, Ricardo Madrazo envió a la revista madrileña uno de sus dibujos a plumilla titulado “Puerta de la Justicia”; La Ilustración dio a conocer a toda España, de manera masiva, cómo era la entrada principal a La Alhambra.
En los años de la década de 1870 hubo dos fotógrafos granadinos que empezaron a enviar sus fotografías a La Ilustración para que las “reprodujesen”. Se trató de José Camino y de García Ayola.
La primera reproducción de una fotografía dibujada de Granada que apareció en 'La Ilustración' correspondió a la visita que hicieron a la Alhambra el embajador del embajador de Marruecos y su séquito;
La primera reproducción de una fotografía dibujada de Granada que apareció en La Ilustración correspondió a la visita que hicieron a la Alhambra el embajador del rey de Marruecos y su séquito; José Camino hizo una colección de fotografías de aquel importante evento que presidía el enviado especial del jerife norteafricano. Debió enviar varias copias a Madrid, una de las cuales fue reproducida, redibujada previamente. Aparecía el séquito en un ambiente de misterio y romanticismo paseando entre la columnata del Patio de la Alberca. La actitud era muy distinta a la foto oficial que compartieron marroquíes y autoridades granadinas posando mezclados en el centro del jardín de los Leones. La colección de aquellas fotos de “moros en la Alhambra” fue comercializada en formato de postales por José Camino en su tienda de souvenirs fotográficos de Puerta Real.
Otra fotografía enviada por José Camino fue sobre la desaparecida Puerta del Sol; iba ilustrando un artículo de Manuel de Góngora sobre los monumentos musulmanes de Granada. Corría principios del año 1878. En este caso el dibujante no se afanó en darle un aspecto de fotografía, más bien todo lo contrario, parece un grabado.
A partir de entonces, de manera esporádica, los fotógrafos de Granada remitían sus fotos. Un dibujante minucioso procedía en Madrid o Barcelona a copiar la foto en formato de plumilla a línea para que pudiese ser reproducida en papel prensa
A partir de entonces, de manera esporádica, los fotógrafos de Granada remitían sus fotos. Un dibujante minucioso procedía en Madrid o Barcelona a copiar la foto en formato de plumilla a línea para que pudiese ser reproducida en papel prensa. Aquellos dibujantes de la primera prensa gráfica española fueron tan buenos que sus trabajos bien podían pasar, en algunos casos, por auténticas fotografías.
Aunque, paradójicamente, la primera imagen de Granada que apareció en La Ilustración fue un esquema de la fábrica de alcohol montada en Motril por los empresarios Lachica, Rodríguez-Aurioles y Agreda; se trataba de una destiladora de melaza para la fabricación de aguardiente y ron que adquirieron al fabricante francés M. Savalle (en 1872).
Las revistas solían reproducir con frecuencia algunas pinturas sobresalientes o premiadas en concursos de pintura de Granada. Fue el caso de la llamativa composición que salió del estudio de Manuel Gómez-Moreno en 1881. El cuadro (hoy propiedad de la Universidad) representa a San Juan de Dios salvando a enfermos en el incendio del Hospital Real en 1549. Inmediatamente fue remitida una copia fotográfica a La Ilustración, que fue pasada a plumilla por uno de sus dibujantes y dada a conocer a toda España. No se conoce el autor de la foto en blanco y negro.
El verdadero fotoperiodismo comenzó en Granada con motivo del terremoto que sacudió a la comarca de Alhama en la Navidad de 1884
El verdadero fotoperiodismo comenzó en Granada con motivo del terremoto que sacudió a la comarca de Alhama en la Navidad de 1884. En los primeros días de 1885, cuando comenzó a conocerse en Granada la magnitud de la tragedia, varios fotógrafos de la ciudad se desplazaron a los pueblos a captar el problema. Entonces sí que una imagen valía más que mil palabras. Aquellas primeras fotos enviadas a Madrid sirvieron para que las autoridades tomasen conciencia del problemón, agravado por las nevadas y el intenso frío que sobrevinieron. El rey Alfonso XII, que ya estaba enfermo, decidió subirse a un tren y desplazarse hasta el lugar.
Uno de los fotógrafos pioneros en ir a Alhama ya a finales de diciembre, y regresar dos veces más durante el mes de enero, fue García Ayola
Uno de los fotógrafos pioneros en ir a Alhama ya a finales de diciembre, y regresar dos veces más durante el mes de enero, fue García Ayola. Acompañó al Rey por su periplo en tierras de la provincia de Granada. Las fotografías que iba enviado a Madrid sirvieron para que el dibujante José Comba realizase interpretaciones “fotográficas” a partir de ellas. Se nota cierta premura en la mayoría de dibujos que hizo en los números de La Ilustración publicados durante el mes de enero de 1885. Las colecciones fotográficas que envió Ayola a Madrid no se conservan, pero dan una idea de ellas las interpretaciones que hacía Juan Comba. Se ven los destrozos de edificios, la gente apiñada en torno a campamentos de cañas y paja, y a la comitiva real a caballo entre la intensa nevada.
José García Ayola se fue convirtiendo, a partir de sus magníficos reportajes sobre el terremoto de Alhama, en el corresponsal gráfico por excelencia de la mayoría de publicaciones gráficas de Madrid y Barcelona
José García Ayola se fue convirtiendo, a partir de sus magníficos reportajes sobre el terremoto de Alhama, en el corresponsal gráfico por excelencia de la mayoría de publicaciones gráficas de Madrid y Barcelona. Pero, desgraciadamente, todavía por la década de 1880 no era posible publicar en papel prensa aquellas fotos del incipiente fotoperiodismo granadino. Las fotografías de actualidad eran transformadas en dibujos lo más exactos posible; incluso en muchas ocasiones superaban al original fotográfico.
El año 1889 fue importantísimo para la presencia de García Ayola en las revistas gráficas nacionales, a cuenta de la Coronación de José Zorrilla como poeta nacional en los actos del Corpus de Granada
Han sobrevivido algunas de aquellas fotografías que hizo Ayola, junto con las versiones que publicaron las revistas. El año 1889 fue importantísimo para la presencia de García Ayola en las revistas gráficas nacionales, a cuenta de la Coronación de José Zorrilla como poeta nacional en los actos del Corpus de Granada. Consiguió que sus dibujos fuesen portadas de las publicaciones gráficas nacionales.
Ayola debió enviar varias copias desde distintos puntos de vista. Del acto principal de la coronación, celebrado en el Palacio de Carlos V, se conservan las fotografías originales y sus respectivos dibujos de prensa.
El año 1889, García Ayola se hinchó a mandar fotografías a La Ilustración, que eran reconvertidas en dibujos de línea y publicados en Madrid. Con motivo del Corpus también envió una colección de estampas de Bibarrambla engalanada, con sus carocas y el monumento central. Juan Comba dibujó una réplica exacta de la fotografía tomada por el granadino, que reproducimos a continuación, comparada con su réplica en dibujo.
Aquel mismo verano de 1889 Granada seguía de moda en toda España. Esto dio pie a que el fotoperiodista García Ayola continuase enviando fotos y dando a conocer los monumentos de la ciudad. En La Ilustración aparecieron varias fotos dibujadas de la Capilla Real y la Alhambra. Incluso una reproducción del enorme cuadro de Isidoro Marín que ganó el concurso del Liceo Artístico con motivo de la coronación de Zorrilla; aquella obra –cuyo paradero desconozco, aunque puede estar en Valladolid- se llamaba “Prisión de Boabdil en la batalla de Lucena”.
El año 1889 todavía deparó una sorpresa más que fue noticia nacional: un ciclón destrozó la Plaza de Toros del Triunfo. Y allí estaba García Ayola para inmortalizar el hecho, y la prensa nacional para publicar una copia dibujada del desastre.
1891: ¡Por fin se publican fotos!
Llegó mayo de 1891 y Torcuato Luca de Tena decidió crear la primera revista que se podía llamar con toda propiedad “revista ilustrada”: Blanco y Negro. Empezó combinando las ilustraciones de dibujos y pinturas, pero también su maquinaria estaba preparada para colocar fotografías de manera directa. Se había inspirado en la revista alemana Fliegende Blatter. Muy pronto los fotorreportajes arrinconaron a los dibujos. Fue un cambio más que cualitativo en la manera de entender la prensa ilustrada del momento.
La primera fotografía que se publicó de Granada en 'Blanco y Negro' fue una escena de gitanos del Sacromonte
El fotoperiodista José García Ayola fue contratado por la nueva publicación para insertar sus fotografías y postales. Al principio resultó curioso ver cómo algunas fotos de Ayola habían sido convertidas en dibujos en La Ilustración y, ahora, las mismas aparecían por fotocomposición en Blanco y Negro. La primera fotografía que se publicó de Granada en Blanco y Negro fue una escena de gitanos del Sacromonte. Después seguirían infinidad de fotografías de los principales monumentos de Granada (Alhambra, Alcaicería, Catedral…).
En ella publicó la primera imagen de un deportista granadino, en 1896; se trataba del ciclista Antonio Muñoz Garrido
José del Perojo, trabajador de La Ilustración, se dio cuenta muy pronto de las posibilidades de negocio que ofrecían las revistas gráficas del estilo de Blanco y Negro: estaba vendiendo más de 200.000 ejemplares semanales. En 1894 creó Nuevo Mundo, otra revista ilustrada que combinaba dibujos con fotografías. En ella publicó la primera imagen de un deportista granadino, en 1896; se trataba del ciclista Antonio Muñoz Garrido. El muchacho había comenzado su afición construyéndose un triciclo de ruedas macizas. Más tarde, se hizo su primera bicicleta y fue el primero en correr con ella por calles y caminos, perseguido por la chiquillería. Fue corredor de velocidad y cofundador del Veloclub Granada, de la Sociedad Excursionista Velocipédica y del Velódromo de Granada.
También en 1896 la revista ilustrada Nuevo Mundo comenzó a fijarse en Granada y a publicar las imágenes que le enviaban los fotoperiodistas granadinos. Las siguientes en aparecer fueron escenas del Sacromonte y sus estudiantes. También aparecieron las primeras fotos del rector del seminario sacromontano y del primer alcalde granadino que salió fotografiado en un periódico, José Gómez Tortosa.
La reacción de La Ilustración a los avances del fotograbado fue adquirir la correspondiente maquinaria para poder incorporar sus fotografías. En 1897, los Ayola continuaban acaparando las corresponsalías gráficas y enviando sus instantáneas a la prensa nacional. Pero se le habían sumado Rafael Señán y Escudero. Con motivo de los juegos florales que se organizaban por el Corpus, en junio de 1897 se publicó la entrega de premios y proclamación de reina (Ilibérica la llamaron) de las fiestas. La distinción de la joven madrina de las fiestas recayó en Margarita Vasco, en tanto que la poesía ganadora fue obra de Miguel Gutiérrez Jiménez, con su Himno La Paz.
Otro granadino que fue de los primeros en salir fotografiado en prensa gráfica española fue el torero Frascuelo
Otro granadino que fue de los primeros en salir fotografiado en prensa gráfica española fue el torero Frascuelo. Salió en Nuevo Mundo en 1898 con motivo de su fallecimiento. Salvador Sánchez Povedano, nacido en Churriana de la Vega en 1842, había triunfado en el mundo de los toros. Hizo mucho dinero, suficiente como para comprarse una finca en Torrelodones y establecerse allí con su familia. Se había retirado en 1890 tras sufrir muchas cornadas y llevarse por delante la vida de 3.801 toros. La muerte le sorprendió el 8 de marzo de 1898.
Con motivo de su muerte, Nuevo Mundo le dedicó varias páginas, en las que incluyó varias fotografías de su familia y una que le había hecho L. Fto. en Granada vestido de miliciano durante el cantón granadino de 1873.
Como última curiosidad sobre las primeras fotografías de Granada y de granadinos publicadas en prensa nacional se encuentra el retrato más conocido de Ángel Ganivet. Hasta el año 1903, con motivo de la conmemoración del quinto centenario de su muerte, prácticamente nadie conocía su cara. Su semblanza y esta primera fotografía también aparecieron en la revista Nuevo Mundo.
A partir de la década de 1910 surgieron como setas las revistas ilustradas, de todo tipo. Incluso algunas con varias tintas. También se fue sumando poco a poco la prensa diaria a la nueva moda de incluir fotografías. En el caso de la prensa local granadina todavía faltaba mucho tiempo para que se incorporase la imagen fotoimpresa. Demasiado.
