En un escrito presentado ante el Ayuntamiento de Granada, la Asociación Oppidum Eléberis solicita la paralización del proyecto de sustitución de la carpintería exterior, así como el acristalamiento de la Casa Museo Federico García Lorca, tramitado y autorizado con el informe de la Ponencia Técnica de Patrimonio Histórico de la Delegación de Cultura, reservado para los edificios de Catalogación General.

Oppidum recuerda que la Casa Huerta de San Vicente, que acoge en su interior el Museo dedicado al poeta Federico García Lorca, fue Incoado para su declaración el 29 de octubre de 1980, y así consta en la base de datos del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico, como Bien de Interés Cultural y además figura como uno de los Lugares Lorquianos en el expediente abierto para su declaración como Bien de Interés Cultural con la tipología de Sitio Histórico.

Los proyectos de ejecución en los bienes incoados, como en los declarados, tienen que ser autorizados con el preceptivo informe favorable de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico de Granada, tal y como se regula en la Ley 14/2007 de Patrimonio Histórico Andaluz, dice la asociación.

En su escrito, Oppidum denuncia que la falta de mantenimiento y conservación por parte de la Corporación municipal en los últimos años no puede solucionarse con una medida tan drástica como la anunciada, que "causa alarma social" y solicita que se abra un período de explicaciones y participación ciudadana, que aclare los motivos por los que se ha llegado a esta situación y si se han estudiado medidas alternativas, que no sean la de sustituir elementos originales de un bien con la máxima protección. "La sociedad quiere ser partícipe en la conservación y protección del patrimonio y no ser mero actores pasivos informados a través de la prensa, en especial en los bienes de titularidad pública", afirma.

Asimismo desde la asociación muestran su preocupación por lo que parece un expediente abierto cuando se anuncia desde la concejalía de Cultura y Patrimonio del Ayuntamiento, que  en paralelo a las obras, se va a aprovechar que el inmueble está cerrado al público para detectar necesidades, estudiar nuevas reparaciones de mantenimiento y conservación y, sobre todo, poner en marcha un nuevo proyecto museístico, "algo que nos recuerda al Museo Arqueológico de Granada que ya lleva siete años cerrado".