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Entrevista

Travis Birds: “Todo gira en torno al deseo, como motor y como esclavitud”

Cultura - JTG - Jueves, 1 de Febrero de 2024
La cantante actúa el viernes en Granada.
Travis Birds, en un concierto.
JTG
Travis Birds, en un concierto.
Si hay una voz conmoverdora en el pop actual esa es la de Travis Birds. De sangre granadina por sus venas, y hermana gemela de la también artista Lord Cah, Travis acaba de sacar su tercer disco a la calle ‘Perro deseo’, y lo toca en Granada (sala Aliatar) el viernes. Quien vio la serie ‘Embarcadero’ seguro que se quedó clavado/a Con la canción de la sintonía,’Coyotes’, que resultó una presentación inmejorable de esa voz estremecedora. También cayó abducido el poeta Benjamin Prado, con quien preparó la réplica a Sabina de sus ’19 noches’ desde el punto de vista de la protagonista femenina de la canción, deliciosa, simpática y muy reveladora de lo que ocurrió antes de aquel portazo “que sonó como un signo de interrogación”. Con ‘Perro deseo’, explora en colores sonoros, muchos, el poliédrico mundo del deseo. No se la pierdan, se harán un regalo, de por vida. 

─ ¿No hay dos sin tres o a la tercera va la vencida?

─ Yo sigo caminando en esto porque es lo que en el presente me apetece, pero ha sido un proceso en el que he tratado de mantenerme alejada de toda la tradición que acompaña al 3 y hacer algo acorde a mi momento vital.

─ Se lo digo porque ya es portada de revistas musicales y sus actuaciones van llenando salas de capacidad medio alta…

─ Caminante no hay camino, se hace camino al andar. Hay tramos mejores, y tramos mas difíciles pero mantener el paso trae también cosas tan bonitas como esas. 

─ A este paso, ¿se ve en polideportivos y megafestivales?

─ Creo que cualquier música necesita un contexto acorde, así que dependerá más del tipo de festival... Pero me gustaría verme en sitios donde la música sea el objetivo principal. 

─ Por eso se lo pregunto, porque su voz y sus canciones me proponen intimidad e introspección a pecho descubierto…

─ Bueno, este disco creo que no es tan exigente en ese sentido, hemos hecho un directo que encaja perfectamente en festivales, aún así cada festival tiene un enfoque, y la música para lucir tiene que tener un contexto acorde.

─ Y hablando de canciones, las hay tan obligatorias que sus autores terminan odiándolas ¿Qué tal se lleva con ‘Coyotes’, con la que sedujo a muchas personas y tiene pinta de ser, “como los diamantes”, para siempre?

‘Coyotes’ la llevo bien. Hay otras que me cuesta más tocar porque distan más de mi momento actual y también son obligadas en mi repertorio

─ ‘Coyotes’ la llevo bien. Hay otras que me cuesta más tocar porque distan más de mi momento actual y también son obligadas en mi repertorio. Yo no las escucho jamás, pero cantarlas con la gente siempre las vuelve especiales porque la energía que llega del público le da una frescura que te hace conectar mucho más con la canción. En ensayos es donde las llevo peor (risas). 

─ Este disco es… ¿Temático?

─ Sí, todo gira en torno al deseo, como motor y como esclavitud, dos polos en un mismo concepto, da mucho en  que pensar en mi opinión. 

─ La sociedad nos propone desear, y cuando se consiguen los deseos… ¿cambiamos de pantalla y nos dejan de interesar o es un motor de búsqueda de por vida?

─ Creo que el deseo es un motor, y también que cuando se cumple, se pasa a otra cosa. Es por eso que creo mucho en disfrutar el camino hacia ese deseo, más que el objetivo de llegar, que es efímero y casi nunca será como habías imaginado. En el camino está la esencia absoluta. 

─ El otro día escuché a un clónico de Sabina y, con mucho sentido del humor cantó ‘19 días’, y acto seguido la mujer que le hacia segundas voces le daba la réplica con su versión… ¿Cómo surgió y que tal resultado le ha dado ese ‘ajuste de cuentas’ tan simpático (o real y necesario)?

Ir de la mano de Benjamín Prado fue un lujo y un aporte increíble en todos los sentidos

─ Fue un escaparate tremendo estar en ese disco con tantos titanes y poder defender una canción tan buena y conocida y por otro lado tan bien reescrita. Ir de la mano de Benjamín Prado fue un lujo y un aporte increíble en todos los sentidos. Fue una idea de Benja y creo que Sabina la acogió con el cariño con el que su amigo la escribió. 

─ En los años sesenta los grupos grababan discos en los que no había dos canciones ni parecidas; luego, en los noventa, a hacer siempre la misma canción se le llamó coherencia y lo anterior ‘dispersión’ ¡bendita dispersión la suya, porque no hay dos piezas iguales…!

─ Es verdad (risas). Me gustan muchos estilos distintos y me gusta encontrarme en ellos, pero creo que al final todo apesta a mí como hilo conductor (risas).

─ ¿Por y para ello buscó varios productores distintos?

─ Quería empaparme de distintas formas de trabajo, hasta ese momento había trabajado con un mismo productor y me apetecía ver las visiones de mi mundo en distintas interpretaciones. Me parece que esa variedad cabía en este disco. 

─ Y veo que su agenda incluye notables… Jairo y Leiva, soy todo oídos…

Con ambos tuve la intuición de que esas canciones brillarían con ellos y se convertirían en algo mucho más grande

─ Afortunada soy. Con ambos tuve la intuición de que esas canciones brillarían con ellos y se convertirían en algo mucho más grande. Con Depedro tenía muchas ganas de tener una canción en la que viera que podía encajar y cuando compuse ‘Urgente’ lo vi claro. Con ‘Grillos’, Leiva solo iba a hacer la producción a priori y pensaba que nadie mejor que él iba a saber vestir una canción tan "pequeña" y hacerle un traje que le hiciera brillar, el tiene el toque y la sensibilidad, tiene una musicalidad especial. Supo entender la canción e iluminarla sin cambiarla. Trabajo magistral que tuvo una guinda increíblemente dulce cuando se animó también a cantarla. 

─ A mí me pega mucho su voz junto a la de Coque Malla por ejemplo… ¿Pero con quién sueña para el puesto?

─ Con Robe, con Drexler, Con Zaz... mucha gente... mucha variedad.

─ Su familia es de Granada… ¿Qué supone esta ciudad y su impronta para usted?

─ Granada la siento casa, es además un lugar con una energía y un misticismo especial y estar allí siempre me conecta con eso. Es un lugar inspirador para mí, que no cambia por muchas veces que vaya y la recorra.