El alcalde de Granada, Francisco Cuenca, ha mantenido un encuentro con representantes de las camareras de piso de Granada para conocer de primera mano su realidad y situación laboral, después de que el Ayuntamiento de Granada aprobara en el pleno de marzo una moción por la que el Consistorio se comprometía a apoyar y exigir sus reivindicaciones laborales al Gobierno de España. 

En este sentido, Cuenca ha trasladado al colectivo, como ya se hizo a través de la iniciativa de pleno, la solidaridad y el apoyo del Ayuntamiento de Granada al colectivo ante la precariedad laboral que padecen, así como el compromiso municipal para mediar con los sindicatos y la patronal hotelera para resolver los problemas laborales que sufren, abogando siempre por "un empleo digno y de calidad" en el sector turístico. 

Cuenca ha reconocido que el sector de las camareras de piso constituye "un pilar fundamental" dentro de la hostelería granadina, "la columna vertebral de uno de los sectores económicos más importantes de la ciudad, el turístico, que debe ser atendido y reconocido por todos, sobre todo, por la precariedad laboral que padecen y la labor profesional que realizan, ya que son una pieza clave para que la ciudad ofrezca su mejor imagen ante los turistas que se hospedan en nuestros hoteles". 

Por su parte, las representantes de las llamadas ‘Kellys’ explicaron que estamos ante un colectivo de 10.000 camareras de piso en toda la provincia, "trabajadoras con una condiciones de trabajo inhumanas, con unos salarios ridículos y con una carga física por las exigencia de las empresa que nos está costando la salud".