La pandemia ha aumentado aún más la temporalidad del empleo en Granada, lamenta CSIF

E+I+D+i - IndeGranada - Jueves, 28 de Enero de 2021
El sindicato considera "alarmante" la temporalidad en los servicios públicos, como los sanitarios.
Prensa hospital/archivo
El sindicato considera "alarmante" la temporalidad en los servicios públicos, como los sanitarios.

CSIF Granada lamenta los datos ofrecidos este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE) correspondientes al cuarto trimestre de 2020 en la Encuesta de Población Activa (EPA) ya que “si bien reflejan una leve disminución en el número de personas desempleadas con respecto al tercer trimestre del año en 1.500 personas menos, cerramos el año 2020 con un total de 106.600 personas sin empleo en nuestra provincia, un total de 22.800 más que a cierre de 2019 y que nos retrocede a niveles de paro del segundo trimestre de 2017 cuando la provincia alcanzó los 109.000 parados”, denuncia la presidenta de CSIF Granada,  Victoria Eugenia Pineda.

Estos datos “son preocupantes y reflejan la situación actual de nuestra sociedad y de nuestra economía al situarnos entre las cuatro provincias con mayor tasa de paro de todo el país, en concreto del 24,84 %, cinco puntos por encima de la tasa de paro que teníamos hace justo un año, y solo superada por las provincias de Huelva, Las Palmas y Cádiz”.

Entre los principales aspectos, CSIF Granada considera “alarmante” que la temporalidad siga aumentando tanto en la empresa privada como en la Administración pública, “en la que hemos alcanzado un porcentaje del 29,9%, de casi diez puntos superior al del sector privado” y esto “lógicamente repercute en la calidad y continuidad de los servicios públicos que se prestan a la ciudadanía, sobre todo en sectores tan básicos como el Servicio Estatal de Empleo, la Seguridad Social, educación o sanidad donde se ha afrontado la pandemia con refuerzos y contrataciones temporales”.

Por último, Pineda reclama atajar la temporalidad y precariedad que sufre el sector de la empresa privada, males estructurales acrecentados por la pandemia, a la par que un plan de recursos humanos en la Administración que garantice la sostenibilidad de los servicios públicos, con un plan de choque sobre las plantillas capaz de hacer frente a la falta de efectivos, a la temporalidad y a la avalancha de jubilaciones que se van a producir, y que dé respuesta de una vez por todas a la agilización en el baremo de las bolsas de contratación y de las ofertas de empleo público y de estabilización pendientes.