Cuando acaba la fiesta

Hoy es Domingo de Resurrección. Acaba, por tanto, la Semana Santa en Granada. Un año más, es tiempo de balances: cuántos visitantes, cuántas pernoctaciones, cuánta devoción, cuánto movimiento económico… Y también es momento de pensar en lo que cuesta, lo que nos cuesta a quienes vivimos en Granada (seamos creyentes, hayamos apostatado o sea nuestro credo el ateísmo) que la ciudad siga funcionando y siendo habitable también en estas fechas.
Tantas tareas que forman parte de la tramoya de esta fiesta de devoción y éxito económico en la que parece haberse convertido la festividad religiosa
Podemos hablar, por ejemplo, de las horas extras que han de realizar los cuerpos de seguridad, entre ellos la policía municipal. O de los cortes de calles y la reordenación general de tráfico y las dificultades que acarrea para los desplazamientos “habituales”, es decir, los de quienes viven aquí y han de seguir cumpliendo un horario y desplazándose. O del incremento de los servicios de limpieza que ha de efectuar la empresa adjudicataria. O de los quilos de cera que deben retirarse (de forma lo más rápida posible) de nuestras calles. Tantas tareas que forman parte de la tramoya de esta fiesta de devoción y éxito económico en la que parece haberse convertido la festividad religiosa.
A pesar de que es innegable el peso económico que, para una ciudad como Granada, tiene la Semana Santa, es bueno reflexionar también sobre lo que nos cuesta.
Por ejemplo: durante toda la semana, se ha incrementado el número de operarios de limpieza en 98 personas diarias, que van a ocuparse de retirar la cera caída en calzadas y aceras, especialmente en las calles del centro (las más concurridas por las diversas procesiones) y, sobre todo, en los nuevos cruces que se han incorporado al itinerario. Además, se han repartido portavelas y bolsitas de papel para las cáscaras de los frutos secos, todo ello de forma gratuita para quienes asisten, aunque ha tenido su reflejo presupuestario en las arcas municipales.
Y sí, de nuevo tenemos que pensar que nada de esto es gratuito
También se realizará a diario la recogida puerta a puerta del cartón comercial y se mantendrá la recogida selectiva de envases, papel y cartón durante las noches, servicio que no se suspenderá tampoco en los ninguno de los días festivos. Y sí, de nuevo tenemos que pensar que nada de esto es gratuito. Al igual que ocurre con el dispositivo que se pondrá en marcha en el momento en que hoy, 20 de abril, acabe la última de las procesiones para retirar la cera de las calles del centro, especialmente de la Carrera de la Virgen, donde en breve ha de empezar el montaje de la Feria del Libro. Hace pocos días Granada Laica hacía crítica del incremento de las subvenciones del Ayuntamiento de Granada a la Federación de Hermandades y Cofradías de la Semana Santa de Granada y de la opacidad que esa institución mantiene respecto al coste real que suponen los “servicios extra” que exige el Plan Parihuela.
Y todo esto ocurre mientras el Ayuntamiento se encuentra inmerso en un complicado proceso de adjudicación del servicio de limpieza, que se anunció en marzo y ha quedado en suspenso por los recursos presentados por algunas de las cinco empresas participantes en el concurso. Quizá en esta próxima semana alguien del equipo de gobierno municipal, en alguna rueda de prensa, nos dé información detallada de todas estas cuestiones, especialmente los dineros que nos cuestan.
Tampoco es bueno que, a cuenta de una semana, por muy santa que sea, olvidemos que la ciudad debe seguir funcionando. Y en eso, el actual equipo de gobierno está demostrando su bajo perfil
Tampoco es bueno que, a cuenta de una semana, por muy santa que sea, olvidemos que la ciudad debe seguir funcionando. Y en eso, el actual equipo de gobierno está demostrando su bajo perfil. Por poner un ejemplo, sigue mostrándose incapaz de solventar problemas tan antiguos como el de mejorar la calidad del aire. La última noticia a este respecto, después de que nuestra alcaldesa hiciera público el “retraso del régimen sancionador” por la puesta en marcha de la Zona de Bajas Emisiones, es que Bruselas va a investigar los incumplimientos de Granada en materia de calidad del aire por sus altos niveles de contaminación.
Pero la primavera sigue su curso. Tras la Semana Santa llegará la Feria del Libro. Luego vendrá el Festival Internacional de Poesía. Luego otra vez el Festival Música y Danza. Luego, luego, luego. Mientras tanto, seguiremos esperando la adjudicación de contratos millonarios como el de la limpieza o la puesta en marcha real de la tan necesaria ZBE. Seguiremos esperando que nuestro ayuntamiento se tome en serio su papel de responsable del futuro de la ciudad y la gestione para que sea más amable y habitable con quienes vivimos en ella, que sea de verdad esa ciudad en la que valga la pena vivir, no solo venir a pasar unos días de fiesta.