Los agricultores piden la suspensión de las obras por los daños a la Vega y sus acequias
El Juzgado admite la demanda de los regantes de la Vega y emplaza a las constructoras de la GR-43 a una vista
El interdicto ha sido presentado por la Comunidad de Regantes Caz de Jotayar de Atarfe y la Junta Central de Usuarios del Cubillas de Pinos Puente.
Entorno de las obras de la GR-43 en una imagen de archivo tomada tras unas lluvias en el otoño de 2016. plataforma vega pinos puente
El Juzgado de Primera Instancia número 18 de Granada ha admitido a trámite la demanda de juicio verbal promovida por regantes de la Vega ante los daños que está provocando la construcción de la GR-43 en el tramo comprendido entre Atarfe y Pinos Puente.
En el decreto de admisión, al que ha tenido acceso El Independiente de Granada, el Juzgado emplaza a las constructoras, una Unión Temporal de Empresas formada por OHL y UCOP Construcciones, y a Intemac, que ejerce la asesoría técnica para el Ministerio de Fomento, a comparecer en la vista. Las partes demandadas tienen diez días hábiles para comparecer.
La decisión judicial es recurrible, mediante un recurso de reposición, aunque la interposición de ese recurso no suspende la resolución.
En el decreto de admisión del Juzgado de Primera Instancia número 18 se informa a las partes de que pueden recurrir a "una negociación para intentar solucionar el conflicto, incluido el recurso a una mediación, pudiendo interesar la suspensión del procedimiento a tal fin".
La Comunidad de Regantes Caz de Jotayar de Atarfe y de la Junta Central de Usuarios de Aguas del río Cubillas de Pinos Puente ha decidido emprender acciones legales tras años de conflicto con las constructoras en los que no han logrado soluciones para los daños que está ocasionando la construcción de esta autovía en la red de acequias.
En su demanda de juicio verbal -un procedimiento más ágil- piden la paralización de 40 obras a lo largo de 5,5 kilómetros del tramo entre Pinos Puente y Atarfe. En ese espacio hay 24 acequias y 16 obras de drenaje transversal. De momento, según las fuentes consultadas, no hay orden de paralización.
Además de los daños sobre el paisaje, uno de los grandes valores de la Vega, la ejecución de las obras está teniendo efectos irreparables para los agricultores que, entre otros problemas, se enfrentan al cambio del curso del agua en las acequias o a la inundación de fincas.
Los intentos de arbitraje han fracasado, incluido el de Asaja, que se ha situado junto a los agricultores subrayando como ellos que estas acciones legales con "la única salida posible" porque "la pervivencia de la Vega está en riesgo".
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