El proceso fue largo y tortuoso, con más de seis años de disputas, protocolos, reuniones, ruedas de prensa, debates… muchas disputas, para al final, con el empeño de la Junta de Andalucía, un grupo de ilusionados investigadores y unos jóvenes profesionales con muchas ganas de hacer algo único, empezaron una experiencia que ahora después de veinte años tengo claro que fue un gran acierto. Y esto viene al caso hoy después de asistir como conferenciante a la jornada sobre Tratamiento con heroína: una alternativa. Antecedentes, situación actual y retos de futuro, organizada por la Agencia de Salud Pública de Cataluña, en la que he destacado aparte del éxito científico, el hecho de haber hecho el proyecto en un centro hospitalario y el apoyo de los medios de comunicación locales, nacionales e internacionales. El Proyecto Experimental de Prescripción de Estupefacientes en Andalucía (PEPSA), había sido aprobado un año antes por la Agencia Española del Medicamento, hace 20 años.

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Joan Carles March, como ponente en la jornada Tratamiento con heroína: una alternativa. Antecedentes, situación actual y retos de futuro, organizada por la Agencia de Salud Pública de Cataluña.

Seis años de espera era un punto de partida complicado, pero después de más de ocho meses de arduo trabajo con los pacientes, gracias al gran Manolo Romero, encontramos que el medicamento heroína podía ser una nueva alternativa para el tratamiento de los heroinómanos que no les había ido bien en anteriores terapias

Seis años de espera era un punto de partida complicado, pero después de más de ocho meses de arduo trabajo con los pacientes, gracias al gran Manolo Romero, encontramos que el medicamento heroína podía ser una nueva alternativa para el tratamiento de los heroinómanos que no les había ido bien en anteriores terapias.

Varias razones estaban contribuyendo a esta victoria parcial:

• La salud física de nuestros pacientes del grupo de heroína mejora cuatro veces más que la de los del grupo de metadona.
• La salud mental mejora casi el doble.
• El riesgo de contagiarse con el VIH es casi cuatro veces menor.
• Y la actividad delictiva se reduce más del doble.

Un resultado esperanzador de un proyecto difícil, complicado, pero probablemente, el mejor proyecto de salud pública de la Escuela Andaluza de Salud Pública en sus 37 años de vida.

Hablar de heroína terapéutica puede sonar a algo raro, pero la realidad es que a personas que han estado perdidos en el mundo de la droga, gastando todo su dinero y el de sus familias en ello, entrando en un pozo sin fondo lleno de dolor, enfermedad, malestar personal y familiar, infecciones, problemas físicos y mentales, delincuencia, robos, daños… era necesario buscarles una solución.

Holanda planteó un ensayo clínico del que nosotros en Granada, en la Escuela Andaluza de Salud Pública, con apoyo de profesionales suizos y discusiones y debates con investigadores de Alemania, Reino Unido y Holanda, fuimos capaces de poner en marcha.

Y la solución la habían encontrado ingleses utilizando la heroína en la farmacopea británica hace años. Le siguieron los suizos con un proyecto que afectaba y sigue afectando a casi todo el país y a más de 1.000 pacientes para, posteriormente, Holanda plantear un ensayo clínico del que nosotros en Granada, en la Escuela Andaluza de Salud Pública, con apoyo de profesionales suizos y discusiones y debates con investigadores de Alemania, Reino Unido y Holanda, fuimos capaces de poner en marcha.

A eso contribuyó el esfuerzo de políticos como Isaías Pérez Saldaña, gran impulsor del proyecto, el gran apoyo de José Manuel Rodríguez y Andrés Estrada, como responsables de las líneas de drogodependencia en la consejería de Asuntos Sociales o la buena cabeza de técnicas como Rosario Ballesta, el trabajo incesante de profesionales como Paco Carrasco o Salvador Rodríguez y sus equipos y la esperanza de unos pacientes y de sus familias.

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Jormada que en Cataluña ha destacado la trascendencia del PEPSA.

El resultado de todos los estudios (Inglaterra, Suiza, Holanda, Alemania, Canadá y España) coinciden en decirnos que la heroína terapéutica es un medicamento eficaz y seguro que ayuda a mejorar la salud y la calidad de vida de heroinómanos que habían fracasado en más de dos intentos terapéuticos previos

El resultado de todos los estudios (Inglaterra, Suiza, Holanda, Alemania, Canadá y España) coinciden en decirnos que la heroína terapéutica es un medicamento eficaz y seguro que ayuda a mejorar la salud y la calidad de vida de heroinómanos que habían fracasado en más de dos intentos terapéuticos previos, que sus familias les habían abandonado a sus suerte, que no tenían trabajo y, muchos, ni vivienda, que se pasaban el día en la calle, buscándose la vida para poder subsistir un día más en pésimas condiciones.

Y la realidad en positivo va aún más allá:

• Disminución de la infección por el virus del sida y de la hepatitis.
• Disminución del consumo de drogas ilegales.
• Mejoras de peso y de estado salud general, mejora de la salud mental, acercamiento a sus familias y a su entorno social y disminución espectacular de la delincuencia.

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Diferentes momentos de la intervención de Joan Carles March sobre la experiencia del programa de Granada.

Acabo de saber en el encuentro internacional sobre tratamiento con heroína realizado en Barcelona, donde he participado como ponente, que Bélgica, Luxemburgo, Francia, Dinamarca y Noruega están también en el listado de países que se van añadiendo a este mundo.

Pero nuestro programa fue y sigue siendo un espaldarazo de salud y vida para muchas personas, ya que les devolvió la alegría de vivir, de sentirse personas con dignidad y la cabeza alta, con posibilidades de iniciar una nueva vida

Poca gente esperaba que tuviéramos éxito, pero la realidad fue espectacular. Hay algunas personas que nos tachaban de locos, de poco profesionales, de dar una «droga» en el hospital, de no ayudar a solucionar el tema de la droga… Pero nuestro programa fue y sigue siendo un espaldarazo de salud y vida para muchas personas, ya que les devolvió la alegría de vivir, de sentirse personas con dignidad y la cabeza alta, con posibilidades de iniciar una nueva vida, recuperando sus amigos de siempre, los que no les fallaron. Sus familias, se sentían agradecidas día a día y todo gracias al empeño de la búsqueda de alternativas a los tratamientos existentes hasta el momento.