El cura de la Paz le acompaña en la acción por la falta de soluciones a un asunto que atenta contra los derechos humanos

El Defensor de la Ciudadanía se encerrará una semana para protestar por los cortes de luz en la zona Norte, ante la falta de soluciones

Ciudadanía - IndeGranada - Viernes, 27 de Septiembre de 2019
Te informamos de una acción de protesta que protagonizará a partir del lunes el Defensor de la Ciudadanía, Manuel Martín, junto al párroco de la barriada de La Paz, Mario Picazo, para protestar por la falta de soluciones para paliar los cortes de luz en el distrito Norte de Granada capital, un problema que "atenta contra los derechos humanos y la dignidad de vecinos y familias" afectados.
Una de las protestas por los reiterados cortes de luz en la Zona Norte.
GUILLERMO MOLERO
Una de las protestas por los reiterados cortes de luz en la Zona Norte.
El Defensor de la Ciudadanía, Manuel Martín, informa del encierro que comenzará el próximo lunes, día 30 de septiembre, a las 10,00 h, en la Iglesia de San Francisco (Franciscanos), calle camino de Ronda nº 65 de Granada, en un comunicado que reproducimos por su importancia íntegramente a continucación. El comunicado ha sido remitido también al presidente del Gobierno en funciones, al presidente de la Junta de Andalucía, al director de la división de Endesa, al alcalde de Granada, delegado del Gobierno andaluz, presidente de la Diputación y subdelegada del Gobierno:
 

Esta es la exposición de motivos:

Desde hace años, los barrios del distrito Norte de nuestra ciudad llevan sufriendo continuas y repetidas interrupciones del suministro eléctrico, una realidad enquistada que, en los últimos meses se ha recrudecido convirtiéndose casi en un modo de vida, a pesar de las temperaturas extremas vividas el pasado invierno y de las olas de calor que Granada ha acusado este verano.
 
Los efectos que esta situación genera en las familias el distrito Norte son de todos  conocidas,  pues  la  electricidad  es  un  suministro  básico   y  necesario. Con esta situación, se ven vulnerados la salud, -hay enfermos conectados a máquinas-; la educación, - menores que no tienen calefacción eléctrica en el invierno-, los negocios, - que sufren apagones-, la  vida  cotidiana –que requiere de neveras, electrodomésticos-, el  alumbrado público; el clima extremo interior en las viviendas, y un largo etcétera.
 

Manuel Martín, Defensor de la Ciudadanía de Granada. P.V.M.

El problema afecta al distrito Norte, pero muy especialmente a las barriadas de La Paz, Cartuja y Molino Nuevo. Son demasiadas las personas que se quedan sin luz, aunque la pagan; y muchas las que desean regularizar su situación.  
 
Las causas que generan esta situación responden, de un lado, a la indiferencia de la compañía eléctrica Endesa que, a pesar de las repetidas peticiones y advertencias, no hace frente al problema. De otra parte, a la inacción de las administraciones que, aun teniendo voluntad política, no resultan operativas o se sacuden el problema aduciendo argumentos competenciales. Y, por supuesto, esta realidad perversa responde a otros motivos que tienen que ver con el uso ilícito que se hace de la luz dentro de un contexto de desigualdad social.

En cuanto a las soluciones, desde la Oficina del Defensor de la Ciudadanía de Granada, en permanente contacto y colaboración con asociaciones y colectivos del distrito, se han propuesto diversidad de iniciativas y hasta el momento, nos consta que, habiendo voluntad política, siguen siendo escasos los avances; habiendo un interés real por parte de las administraciones, el problema se ha cronificado.

- No basta con haber impulsado Mesas de trabajo inter-institucionales para lograr acuerdos que se lleven a cabo y cambien el estado de las cosas.
 
- No basta con el acuerdo unánime de toda una Corporación Municipal para pasar a la acción.
 
- No bastan las mociones y declaraciones institucionales.
 
- No basta con haber interpuesto denuncias a Endesa, haber acordado medidas urgentes y eficaces, o solicitado informes técnicos, indemnizaciones o planes de actuaciones eficaces a la compañía eléctrica.
 
- No basta con las concentraciones y manifestaciones vecinales.
 
- No basta con todos y cada uno de los pasos que se han dado, nada de esto es suficiente, pues a pesar de que hay voluntad política, el problema sigue enquistado, no se resuelve, las cosas en Norte permanecen igual o van de mal en peor y las familias siguen sufriendo una terrible desigualdad energética de la que no son responsables.
 

Acuerdos

Para el Defensor de la Ciudadanía de Granada, el problema descrito constituye el mayor y principal problema de la ciudad de Granada, la mayor de las reclamaciones, y así lo ha denunciado en repetidas ocasiones, sin que ello resulte suficiente para lograr los cambios necesarios que devuelvan a la ciudadanía de estos barrios sus derechos. Cuando hablamos de la luz  estamos hablando de un bien de primera necesidad sin el cual hoy no es posible vivir, no asegurar el suministro eléctrico conculca los derechos humanos fundamentales.
 
Por ello, antes de cejar en el empeño y habiendo valorado posibles medidas para que compañía eléctrica y responsables políticos de todos los ámbitos pasen a la acción y resuelvan esta lacra, comunicamos a la ciudadanía de Granada y a los medios de comunicación la intención de iniciar un encierro de una semana  en solidaridad con los vecinos afectados y como protesta  por la falta de soluciones contundentes y efectivas a los cortes de luz en el distrito.
 
Este pequeño enclaustramiento no es quedarnos en silencio, es un grito. Con él, queremos hacernos voz con las personas del  Distrito Norte, gritar con  sus bocas y hacer visible su oscuridad. Su sufrimiento es y debe ser el nuestro, el de toda Granada: no podemos permanecer callados y apagados  ni un día más.
Por ello hemos decidido dedicar unos días de nuestras vacaciones de  verano, -qué supone una semana de encierro frente a los meses de oscuridad que  ellos llevan-, para hacernos partícipes de la grave situación de emergencia social en la que se encuentran, denunciar la terrible vulneración de los derechos humanos que están padeciendo, y en definitiva llamar a todas las puertas que puedan abrirse, visibilizando esta terrible emergencia humanitaria.
 
Tanto Mario Picazo, Cura de la barriada de La Paz, como este  Defensor, somos conscientes de la complejidad del problema, conscientes de la  voluntad política de arreglo, conscientes de las implicaciones que los cortes  de luz tienen, si bien entendemos que la no acción, el mirar hacia otro lado o el permanecer parados y a la espera, sólo sirven para prolongar el problema en el tiempo y permitir que se siga cronificando y aumentando una realidad inhumana e injusta que están viviendo nuestros vecinos.
La decisión es firme y nadie podrá detenernos con palabras.
 
Para poder llevar a cabo esta acción contaremos con el apoyo de la Fraternidad Franciscana de Granada (Franciscanos), que nos acogerá en este primer encierro.
 
Comenzaremos el próximo lunes día 30 de septiembre, a las 10,00 h, en la Iglesia de San Francisco (Franciscanos), calle camino de Ronda nº 65 de Granada.
 
Invitamos a la ciudadanía de Granada que comparta esta aspiración a acompañarnos en el arranque, así como a los medios de comunicación que deseen hacerse eco de nuestras reivindicaciones.
 
Enviaremos copia de este acuerdo a los Gobiernos de España, la Comunidad Autónoma y el Ayuntamiento, así como a la compañía eléctrica Endesa, y a la ciudadanía a través de los medios de comunicación.
 
A lo largo de esta semana de encierro, también contaremos con el apoyo de los diferentes colectivos, asociaciones y ONG de la ciudad que quieran solidarizarse con esta justa reivindicación.
 
Queremos dejar claro que nuestra intención carece de toda heroicidad, tan sólo permaneceremos sin salir al exterior durante una semana: las únicas víctimas de esta historia están apagadas en sus casas, en el distrito Norte, apagadas en invierno, sin brasero, en verano sin nevera, sin salud, sin lavadora, sin tele, sin secador, sin conectar el teléfono, sin ver nada... Porque vivir apagados es casi como no vivir; es desconectarles, apartarles de todo y  de algún modo no ser vistos, porque a oscuras y en penumbras, ni los problemas se ven.
Esperamos que este encierro suponga la toma de decisiones y puesta en marcha de soluciones reales y eficaces tanto por parte de las distintas administraciones implicadas como de la compañía eléctrica suministradora.
 
Manuel Martín García
Defensor de la Ciudadanía de Granada