Ecologistas en Acción ha analizado la presencia del herbicida glifosato y su metabolito de degradación AMPA -el subproducto, todavía contaminante, que queda tras su degradación- en las aguas superficiales y subterráneas de las demarcaciones hidrográficas españolas durante el período 2015-2019. Los resultados concluyen, indica Ecologistas en Acción, que "el glifosato contamina el medio acuático y que es necesaria su prohibición".

Y aguas de varias zonas de Granada se encuentran entre las más contaminadas: "En todos los años analizados hay municipios granadinos entre los diez valores más altos de España", afirma Ecologistas en Acción. 

Los datos, proporcionados por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD) en respuesta a una petición ambiental formulada por Ecologistas en Acción, muestran la "elevada presencia de glifosato y AMPA en todas las demarcaciones hidrográficas en las que se han realizado análisis de control de estos dos contaminantes". 

El informe de Ecologistas en Acción está en línea con la información publicada por El Independiente de Granada hace unas semanas sobre el estado de los acuíferos, donde se alertaba de la contaminación de ocho masas de agua subterránea por nitratos o pesticidas. 

El glifosato fue detectado en el 31% de las aguas superficiales. El valor límite de 0,1 μg/l, establecido como referencia de acuerdo a la Guía para la Evaluación del Estado de las Aguas, se superó en un 22 % de las muestras. En cuanto al AMPA, se detectó en un 42% de las muestras y su valor de referencia de 1,6 μg/l se superó en un 17% de muestras. Respecto a las aguas subterráneas, en un 11% y un 0,3% de las analíticas se han detectado respectivamente glifosato y AMPA, mientras que un 7% y un 0,3% de las muestras analizadas han superado el valor límite que establece la Directiva de Aguas Subterráneas.

Los municipios granadinos donde se encuentran los valores más altos, dentro de la lista anual de los diez valores máximos de glifosato o AMPA en aguas superficiales o subterránas, han sido:

-Alhama de Granada: contaminación por glifosato en aguas superficiales, 2015 y 2016.

-Motril: contaminación por glifosato en aguas subterráneas, 2017, 2018 y 2019.

-Villamena (Valle de Lecrín): contaminación por glifosato en aguas subterráneas, 2017.

Algunas de las superaciones de los valores límite pueden ser clasificadas como "de extremada preocupación" por haberse detectado concentraciones del plaguicida centenares de veces superiores a los valores de referencia, alerta Ecologistas en Acción.

A la luz de la elevada contaminación del medio acuático, Ecologistas en Acción recomienda al MITERD y al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación:

• Que retire la autorización a aquellos plaguicidas de uso agrario que contengan glifosato.
• Que redacte normas de muestreo y análisis de plaguicidas en aguas superficiales y subterráneas para que la información sea completa, desagregada por territorios y comparable en cuanto a número de puntos de muestreo y periodicidad de las muestras.