La capital ha gastado más de 116.000 euros en la señalización de los carriles reservados y su posterior repintado
La puesta en marcha de los carriles reservados y su posterior repintado para abrirlos de nuevo al tráfico de vehículos privados ha tenido un coste total de 116.400 euros. Son datos facilitados por el gobierno local de PP y Ciudadanos a la concejala socialista Raquel Ruz, que preguntó al área de Movilidad por el coste de los trabajos que se llevaron a cabo en su día para habilitar los carriles reservados para transporte público, bicicletas y vehículos de movilidad personal que acaban de revertirse.
Según la información del equipo de gobierno, la puesta en marcha de estos carriles supuso 47.418,61 euros en señalización horizontal, 19.667,12 euros en señalización vertical y 4.172,79 euros en elementos de balizamiento.
En cuanto a la reversión de esos carriles amarillos para convertirse en lo que el concejal de Movilidad, César Díaz (PP), llama "carriles pacificados", el bipartito estima un coste de 45.142,02 euros.
En total, por tanto, algo más de 116.400 euros.
El tránsito de vehículos privados se permite ahora, aunque con una limitación de velocidad de 30 kilómetros hora y con preferencia a autobuses, taxis, bicicletas y vehículos de movilidad personal.
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