más de 100 espectáculos (41 del Festival y más de 60 del FEX)
Comienzan 27 días llenos de música y danza internacional en Granada
La Misa en si menor de Bach, considerada como una de las cumbres absolutas de la música occidental, inauguró oficialmente la 74 edición del Festival de Granada.
Ayto. Granada
Inauguración de la 74 edición del festival.
Comienza la 74 edición del Festival Internacional de Música y Danza de Granada. Serán 27 días llenos de música y danza repartidos en más de 100 espectáculos (41 del Festival y más de 60 del FEX), que se celebrarán en los palacios y jardines de la Alhambra y otros bellos rincones de Granada y provincia
La Misa en si menor de Bach, considerada como una de las cumbres absolutas de la música occidental, fue la encargada de inaugurar oficialmente la 74 edición del Festival de Granada. Para esta ocasión se contó con un elenco excepcional de cinco solistas de proyección internacional: Jone Martínez, soprano; Lea Elisabeth Müller, mezzosoprano; Carlos Mena, contratenor; Jakob Pilgram, tenor, y Tobias Berndt, barítono, acompañados de La Cetra (Barockorchester & Vokalensemble Basel), uno de los conjuntos barrocos más prestigiosos de la actualidad dirigidos por el reconocido especialista Andrea Marcon. La cita fue en el Palacio de Carlos V.
Foto: Junta de Andalucía
Lo más llamativo, sin embargo, es que esta obra monumental –escrita por quien fue un devoto luterano, arraigado en la tradición protestante alemana– sigue punto por punto el guion de la liturgia católica romana
"La más grandiosa obra de arte musical que ha visto el mundo", fue la definición que Carl Friedrich Zelter, director de la prestigiosa Singakademie de Berlín y consejero musical de Goethe, la Misa en si menor de Johann Sebastian Bach, como recuerda el festival, que precisa que, pese a su título unificado, la Misa no fue concebida como un todo orgánico, sino que Bach fue ensamblando sus distintas partes a lo largo de los años, para finalmente reunirlas al final de su vida. El resultado es una especie de colosal testamento musical de su arte sacro, una summa que sintetiza y culmina su pensamiento litúrgico y contrapuntístico. Lo más llamativo, sin embargo, es que esta obra monumental –escrita por quien fue un devoto luterano, arraigado en la tradición protestante alemana– sigue punto por punto el guion de la liturgia católica romana. Este gesto puede leerse hoy no solo como una muestra de apertura intelectual y ecuménica, sino también como un tributo a una forma de arte sacro que trasciende las fronteras confesionales.
La Cetra da vida a la música del pasado con un enfoque fresco, dinámico y contemporáneo. El rotundo éxito de público y crítica en los principales festivales internacionales, en las salas de conciertos más importantes de Europa y a través de una amplia gama de retransmisiones y producciones discográficas, dan testimonio de la genialidad de la orquesta. Una apertura majestuosa para un festival que aspira a la excelencia.
