La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica cree que "contraprogramar actos alternativos merma eficacia y credibilidad al movimiento memorialista granadino"

Ciudadanía - IndeGranada - Martes, 10 de Julio de 2018
En un comunicado, el colectivo lamenta que no se celebre un único acto para recordar a las víctimas de la represión franquista.
Tapia del cementerio de Granada.
P.V.M.
Tapia del cementerio de Granada.

La Asociación Granadina para la Recuperación de la Memoria Histórica ha hecho público un comunicado ante la convocatoria, el próximo 18 de julio, de un "acto alternativo" para recordar a las víctimas del franquismo suscrito por otras asociaciones memorialistas y diversos colectivos.

En el comunicado la asociación advierte de que esta desunión "merma eficacia y credibilidad al movimiento memorialista granadino y a la izquierda en general", más aún en un momento político en el que "tras la recuperación del Gobierno del Estado por la izquierda parlamentaria, se abre la posibilidad de un impulso a las políticas memorialistas efectivas que habían sido desterradas desde 2011 por los ejecutivos del Partido Popular". 

La memoria de miles de víctimas asesinadas no puede ser gestionada en espacios públicos de forma sesgada a golpe de tácticas y estrategias partidistas. El memorialismo histórico fracasaría si se somete instrumentalmente al dirigismo político.

Este es el comunicado íntegro difundido por la asociación: 

"Ante la convocatoria del “Acto Alternativo en la Tapia del Cementerio de Granada, Homenaje Reivindicativo a las víctimas del Franquismo” que suscriben varias asociaciones memorialistas y diversos colectivos a celebrar el próximo 18 de julio de 2018, la Asociación Granadina para la Recuperación de la Memoria Histórica manifiesta:

Que, como ha ocurrido en los tres últimos años, una parte del memorialismo granadino se ha “desvinculado del Acto institucional y memorialista” que tradicionalmente se viene celebrando el 20 de julio a las 20 horas (efeméride del inicio de la sublevación militar en Granada) con participación de familiares, asociaciones, organizaciones políticas, sindicatos y otros colectivos culturales.

Las asociaciones memorialistas que convocan el Acto del 18 de julio lo hacen porque no han impuesto sus propuestas. Consideramos que esa “desvinculación” responde más a un veto político, inexplicable, a la intervención en el mismo de instituciones y sus representantes con competencias memorialistas, pues siempre se ha tratado de equilibrar la secuencia del acto para garantizar el protagonismo de familiares de las víctimas y del movimiento asociativo.

No se ajusta a la verdad el que se haya limitado las intervenciones de familiares y víctimas, sino que simplemente han renunciado a señalar intervinientes para el 20 a las 20 horas.

En el mismo sentido jamás se ha prohibido la exhibición o enarbolamiento de banderas republicanas, baste repasar las imágenes de las ediciones pasadas.

AGRMH, considera que no se ha hecho “todo lo posible” para realizar un Acto Homenaje conjunto el día simbólico del 20 de julio a las 20 horas, día en que fue inaugurado el Memorial de Víctimas de la represión franquista en Granada el pasado año de 2017.

Consideramos que la gestión pública de la memoria histórica requiere el efectivo empuje del movimiento memorialista que es esencialmente pluralista y verdadero protagonista de la recuperación de la verdad, justicia y reparación contra la impunidad de los crímenes del franquismo. Empuje que en las últimas décadas ha encontrado la sensibilidad/complicidad para trasladar sus reivindicaciones históricas a políticas públicas emanadas del Parlamento de Andalucía, caso de las iniciativas tras la aprobación de la Ley de Memoria Histórica y Democrática de Andalucía o la programación del I Plan de Memoria Histórica de Andalucía, 2018-2022.

Contraprogramar Actos “alternativos” merma eficacia y credibilidad al movimiento memorialista granadino y a la izquierda en general precisamente en las circunstancias actuales en que, tras la recuperación del Gobierno del Estado por la izquierda parlamentaria, se abre la posibilidad de un impulso a las políticas memorialistas efectivas que habían sido desterradas desde 2011 por los ejecutivos del Partido Popular.

La memoria de miles de víctimas asesinadas no puede ser gestionada en espacios públicos de forma sesgada a golpe de tácticas y estrategias partidistas. El memorialismo histórico fracasaría si se somete instrumentalmente al dirigismo político.

Consideramos, en fin, que se falta a la buena memoria de miles de republicanos, socialistas, ugetistas, anarquistas, comunistas que dieron -abrazados y entrelazadas las manos- sus vidas por una causa común: por la Libertad, Igualdad, Progreso, Democracia y por los Derechos Ciudadanos".