Detenidos dos jóvenes que se dedicaban a robar en coches de visitantes a la playa de La Rijana, en Castell de Ferro

Ciudadanía - IndeGranada - Martes, 12 de Junio de 2018
El agreste acceso a la playa de La Rijana impide tener a la vista los vehículos.
andalucia.org
El agreste acceso a la playa de La Rijana impide tener a la vista los vehículos.

La Guardia Civil, en el marco de la operación Mohumi, ha conseguido detener en Carchuna-Motril a dos individuos de nacionalidad marroquí, de 20 y 23 años de edad respectivamente, con numerosos antecedentes policiales, como presuntos autores de al menos 15 robos en interior de vehículos, perpetrados todos ellos en las inmediaciones de la playa de la Rijana de Castell de Ferro.

Los detenidos se habían especializado en robar en los coches que los turistas estacionaban en las inmediaciones de esta playa, a los que presuntamente les robaban el equipaje y cuantas otras cosas de valor tuvieran dentro: relojes, teléfonos móviles, ordenadores portátiles, etcétera. 

De los dos detenidos el joven de más edad también ha sido detenido por un presunto delito contra la seguridad vial por conducción temeraria después de que huyera a gran velocidad tras esquivar el dispositivo dispuesto por la Guardia Civil para procurar su detención.

Las víctimas de estos cacos eran los turistas que accedían a esta playa de Castell de Ferro, sobre todo extranjeros. En marzo, al comprobar que los robos se sucedían desde el pasado mes de enero de forma periódica en esta zona, la Guardia Civil puso en marcha una operación para identificar y detener a los ladrones.

Esta playa tiene la dificultad de que es un paraje muy agreste y la zona de estacionamiento de vehículos queda muy lejos de la orilla del mar. Que los coches quedaran tan lejos de la vista de sus propietarios es la circunstancia que aprovecharon los detenidos para robar. Estos llegaban hasta los vehículos, rompían una de las ventanillas, sustraían todo lo que consideraban que tenía valor y huían rápidamente. Al ser un descampado y sin vigilancia, resultaba muy difícil identificar a los ladrones, ya que si detectaban la presencia de la Guardia Civil no actuaban.

Para poder lograr identificar a los ladrones, el pasado día 9 de junio un guardia civil se escondió con unos prismáticos entre los pinos del barranco cercano a la zona de estacionamiento de la playa Rijana. Su misión era vigilar si alguien merodeaba por los coches allí aparcados. Cuando el agente vio a dos jóvenes bajar de un turismo, romper la ventanilla de varios vehículos y robar dentro, alertó al resto del dispositivo de las características físicas estos y del vehículo en el que más tarde huyeron.

La Guardia Civil estableció un control en la entrada de Calahonda, a la altura del kilómetro 345 de la N-340, para interceptar este vehículo. Los agentes le dieron el alto al verlo llegar, pero el conductor primero hizo amago de frenar, para luego acelerar bruscamente y huir a gran velocidad,  haciendo caso omiso de hasta cuatro semáforos en rojo y poniendo en peligro a todos los vehículos con los que se cruzó, hasta que finalmente fue interceptado 3 kilómetros después en la localidad de Carchuna y sus dos ocupantes detenidos. En el maletero del vehículo la Guardia Civil recuperó los objetos robados poco antes.

Objetos robados recuperados por los agentes. guardia civil

En el dispositivo que ha conseguido detener a estos dos jóvenes delincuentes han participados los agentes del puesto de Castell de Ferro y del Área de Investigación de Motril.