Los trabajos, que reordenarán el trasiego de vehículos, tienen un presupuesto de 212.000 euros

La remodelación de los exteriores del aeropuerto, otra obra que sacrifica grandes árboles

Ciudadanía - Redacción El Independiente de Granada - Sábado, 16 de Noviembre de 2019
Aena explica que no hay otro espacio para la ampliación del área de estacionamiento para el transporte público y asegura que muchos de estos árboles están "secos o en mal estado".
Imagen de la isleta de la que se retiran los árboles.
P.V.M.
Imagen de la isleta de la que se retiran los árboles.

Una parte de los grandes árboles que se extienden en el exterior de la terminal del Aeropuerto Federico García Lorca no seguirán en pie. Las obras de remodelación de los exteriores, para ampliar la dársena destinada al transporte público, sacrificarán ejemplares. 

Aena confirma a El Independiente de Granada que esos trabajos obligan a retirar árboles, como habían alertado, a través de cartas al director, viajeros tras su paso por el aeropuerto.

Según la información facilitada por la empresa pública, "una cantidad importante de esos árboles están secos o en mal estado". Además, se habían convertido en "refugio para palomas", lo que "representaba también un riesgo en términos de seguridad operacional, debido a su cercanía al campo de vuelo". 

Aena subraya que "una cantidad importante" de estos árboles estaban "secos o en mal estado".

No es la primera vez que una obra sacrifica árboles en Granada. La más reciente, en La Chana, donde ecologistas y otros colectivos ciudadanos criticaron las talas que se llevaron a cabo. Fuera de la ciudad, las de la Segunda Circuvalación también generaron protestas en su día. 

Las obras que se ejecutan ahora en el Aeropuerto se centran en la reordenación de la zona de estacionamiento para el transporte público. Se va a acondicionar "una especie de área intermodal, en la que se ubicarán los autobuses, los taxis y los vehículos de transporte con conductor".

"Hasta ahora, los autobuses estacionaban al final del edificio terminal -junto a la zona de llegadas-, los taxis lo hacían en la fachada del edificio y los vehículos con conductor no disponían de ningún espacio específico", según explican las fuentes de Aena, que destacan que la nueva zona intermodal que se está acondicionando con estos trabajos "hará más fácil la localización de esos medios de transporte por parte de los pasajeros, al estar todos situados en el mismo entorno".

También permitirá, lo que la empresa pública considera "más importante", que se reorganice "el trasiego de vehículos en las inmediaciones del edificio terminal, donde, debido al incremento que viene experimentando el tráfico aéreo, suele concentrarse un número considerable de pasajeros a la espera de estos medios de transporte".

El incremento de vuelos en el Aeropuerto Federico García Lorca ha hecho, recuerdan desde Aena, que actualmente operen hasta cinco vuelos en una franja de tan solo dos horas, "con lo que ello conlleva en términos de viajeros esperando alrededor de las dársenas de los autobuses y con un espacio limitado".

La remodelación que se lleva a cabo, que cuenta con un presupuesto de 212.423 euros, ampliará la superficie dedicada al aparcamiento del transporte público. En el caso concreto de los autobuses, explican desde Aena, el nuevo proyecto permitirá pasar de las 7 dársenas actuales a 11, de modo que la superficie dedicada a este aparcamiento pasará de 1.695 metros cuadrados a 3.322. 

'La ampliación de las dársenas para el transporte no era factible acometerla en otro espacio', alega Aena

"Esta ampliación no era factible acometerla sobre el espacio que ocupan ahora las dársenas, ya que el crecimiento estaba limitado por otra edificación existente en la zona, de modo que la opción que quedaba era ejecutarla justo enfrente. Como consecuencia de ello y de esa lógica necesidad de espacio, habrá que retirar una parte de los árboles de la isleta ajardinada" existente a la salida del recinto desde el aparcamiento y el edificio de la terminal. 

Fotos de la zona en la que se acometen los trabajos, ya vallada.  

"Una cantidad importante de esos árboles están secos o en mal estado y se habían convertido en refugio para palomas, algo que representaba también un riesgo en términos de seguridad operacional, debido a su cercanía al campo de vuelo", subrayan desde Aena.