'¿Quo vadis, Sra. Montero?'

Blog - Punto de fuga - Cristina Prieto - Jueves, 7 de Julio de 2022
Paula Dapena, jugadora de fútbol, durante la manifestación del Orgullo en Pontevedra.
Paula Dapena, jugadora de fútbol, durante la manifestación del Orgullo en Pontevedra.

El mismo tiempo ha tardado la derecha en criticar el viaje a Nueva York de la Ministra de Igualdad, Irene Montero, por el transporte utilizado que la izquierda en defenderlo. De nuevo, el “y tú más” vuelve a la política –realmente, nunca se fue- al que se van incorporando nuevos actores según van consiguiendo escaños y responsabilidades. Claman por el dinero público gastado los mismos que manejaban una caja B, arreglaban su sede nacional sin facturas para eludir el pago de impuestos, despedían en diferido en forma de simulación o tuvieron que apartar al portavoz de su partido en el Parlamento de Andalucía –todo un señor juez- por fraude en la concesión de unas subvenciones. Del otro lado, lo justifican quienes llegaban a la política para acabar con la casta o tuvieron algunos ‘problemillas’ con el reparto de los fondos de formación. Estos últimos apelan al machismo de los anteriores para defender el viaje porque aseguran que no soportan que mujeres jóvenes y progresistas ostenten altos cargos. Qué argumento tan pobre.

Sin embargo, sólo las feministas están hablando de lo realmente importante, el contenido de la agenda desplegada en Estados Unidos y la oportunidad de viajar, en este momento, a un país que acaba de dinamitar uno de los derechos más importantes de las mujeres

Sin embargo, sólo las feministas están hablando de lo realmente importante, el contenido de la agenda desplegada en Estados Unidos y la oportunidad de viajar, en este momento, a un país que acaba de dinamitar uno de los derechos más importantes de las mujeres. La decisión de la Corte Suprema de derogar la sentencia Roe Vs Wade que protegía el derecho al aborto desde 1973 ha abierto la espita para que los estados más conservadores hayan emprendido la carrera para ver quien limita antes la libertad de las mujeres volviendo, incluso, a leyes del siglo XIX. Aunque Montero se haya mostrado encantada con las reuniones mantenidas, no hay que olvidar que han sido de segundo nivel, con asesoras externas (de la Casa Blanca y la ONU) y una conocida activista por los derechos de las mujeres y periodista con un pasado poco aclarado de colaboradora con la CIA. Pero, lo que ha hecho saltar todas las alarmas, ha sido la reunión de la Ministra con responsables del Center for Reproductive Rights (Centro para los Derechos Reproductivos) que promueve los vientres de alquiler.   

Llama la atención que nuestra representante haya viajado 5.800 kilómetros para hablar de la defensa de los derechos de las mujeres mientras en nuestro país los va laminando

Llama la atención que nuestra representante haya viajado 5.800 kilómetros para hablar de la defensa de los derechos de las mujeres mientras en nuestro país los va laminando. Entre su vuelo a Time Square y su vuelta a Madrid, han muerto a manos de sus parejas o ex parejas cuatro mujeres, las profesoras Juana Gallego y Maden Castillo han sido apartadas del Máster de Género y Comunicación que ellas crearon en la Universidad Autónoma de Barcelona “por razones académicas” según la dirección, nada se sabe aún de las alegaciones presentadas al anteproyecto de Ley Trans por un gran número de asociaciones feministas y este texto sigue sin presentarse a la opinión pública para someterlo a un serio de debate. Además, no sabemos si a Nueva York ha llegado la foto de la futbolista Paula Dapena arriesgando su integridad física y obviando las amenazas recibidas por salir en una manifestación del Orgullo en Pontevedra con un cartel en el que podía leerse “ser mujer no es un sentimiento”. ¿Quo vadis, Sra. Montero?

No hay nada extraño en que los y las responsables ministeriales visiten otros países para establecer relaciones e intercambiar experiencias, lo que no es de recibo es que se les caiga la baba por entrevistarse con representantes estadounidenses cuando desprecian a las feministas autóctonas, con currículos académicos y activistas de gran prestigio

No hay nada extraño en que los y las responsables ministeriales visiten otros países para establecer relaciones e intercambiar experiencias, lo que no es de recibo es que se les caiga la baba por entrevistarse con representantes estadounidenses cuando desprecian a las feministas autóctonas, con currículos académicos y activistas de gran prestigio. Hartas están ya las españolas de pedir reuniones con la Sra. Montero para estudiar la propuesta sobre la abolición de la prostitución en un texto legal ya trabajado por la Plataforma Abolicionista sobre el que la Ministra aún no se ha pronunciado. Hartas están ya las españolas de pedir que se abra un debate serio sobre el anteproyecto de Ley Trans para que la ciudadanía  tenga todos los datos, pero a la señora ministra tampoco le interesa. Hartas están ya las españolas de denunciar que el Pacto de Estado contra la Violencia está dejando desprotegidas a las víctimas sin que, por parte del Ministerio no se obtenga nada más que el tuit plantilla tras cada asesinato. Y hartas estamos todas de que se hable de nosotras como “personas menstruantes” o “cuerpos gestantes”.

¿De qué derechos ha hablado la Ministra de Igualdad de España en Estados Unidos? ¿Ha contado a sus interlocutoras norteamericanas que pretende silenciar al movimiento feminista español con sanciones de hasta 200.000 euros si decimos que las mujeres no tienen pene? O, ¿tenemos que empezar a pensar que está buscando apoyos en los lobbies norteamericanos por si necesitara más presión para aprobar una Ley Trans -que no es ni urgente ni necesaria- en el país donde se asienta el gran negocio farmacéutico del transgenerismo?

Si no has tenido la oportunidad de leerlos y quieres volver a hacerlo, estos son otros artículos de Cristina Prieto en este blog, 'Punto de Fuga':

Y dos reportaje de Cristina Prieto 

 

 

 

Imagen de Cristina Prieto

Madrileña afincada en Andalucía desde 1987, primero en Almería y posteriormente en Granada donde he desarrollado mi carrera profesional como periodista. Me licencié en Periodismo en la Universidad Complutense de Madrid, cursé mi suficiencia investigadora en la Universidad de Granada dentro del programa Estudios de la Mujer y leí mi tesis doctoral en la Universidad de Málaga.